En la tarde de este viernes los médicos les informaron que sufrió una parálisis cerebral a causa de la asfixia que tuvo en la ambulancia al nacer. Según la doctora que atendía a la mamá de Ignacio en Olta, el bebé podía nacer por parto natural, pero en realidad tendría que haberse programado una cesárea.

Ignacio venía dado vuelta para nacer de pies y su cabecita se atascó en el canal de parto. Cuando rompió bolsa estaba en el hospital de Chamical, Sebastián dijo que los médicos “se lavaron las manos y la hicieron trasladar a La Rioja, les preguntamos si así llegábamos hasta la capital antes de que naciera y nos dijeron que sí, pero en la ambulancia empezó con el trabajo de parto”, contó el papá de Ignacio.  

En cuanto a la respuesta del gobierno, Sebastián manifestó que lo llamaron desde el municipio de Olta y Chamical, pero responsabilizó a los tres médicos que los atendieron en el interior porque “pensando en los culpables, los intendentes no estuvieron en la guardia, pero si nos ponemos a pensar nunca hubo en el interior un sistema sanitario acorde a las circunstancias, en ningún gobierno”, afirmó.

Además enfatizó que mucha gente no quiere salir a hablar “porque trabajan en el municipio o son contratados, tienen miedo”.  

Sebastián remarcó que en el Hospital de la Madre y el Niño toda la gente que va del interior vino por la falta de atención que hay en los hospitales de las distintas localidades.

“Hubo un chico que vino de Aimogasta, tuvo que salir en moto a buscarle nafta a la ambulancia, está esperando hace dos días que los busquen, están varados acá. Otra mujer embarazada tuvo que ser trasladada desde Patquía en una camioneta del municipio”, contó.

En cuanto a la evolución de Ignacio, González destacó que “ahora vamos a ver cómo hacemos porque Ignacio va a necesitar kinesiólogo, neurólogo, no sabemos si esto va a ser de por vida, si hubiera un poquito de la atención que hay acá en capital para cada lugar del interior, sinceramente la gente estaría feliz”. 

Fuente: Fénix

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