Mientras la mayoría de los argentinos sufren la pérdida de poder adquisitivo producto de una inflación descontrolada y de los atrasos en la recomposición salarial, tanto el presidente Alberto Fernández como sus ministros de gobierno recibieron a lo largo de los primeros meses de este año importantes aumentos en sus sueldos.
Siendo un tema muy poco abordado por la clase política, los salarios de los funcionarios públicos de mayor jerarquía en el Estado nacional están implicados en una larga polémica referida a los límites que deberían tener ante los incrementos por paritarias y el desfase que tienen respecto de la realidad de millones de trabajadores formales e informales.
Según informaciones que se desprenden del portal datos.gob.ar y que fueron reveladas anoche por la abogada Silvina Martínez en el programa +Voces, del canal LN+, Alberto Fernández y sus ministros recibieron aumentos salariales de casi el 50% solo en los primeros seis meses del corriente año, lo que superó con creces la inflación acumulada en ese mismo periodo.
En el caso del presidente, en diciembre del 2020 percibía un sueldo bruto de $354.694,16; en abril de este año, en cambio, pasó a cobrar $390.163,58; para mayo ya había subido nuevamente a $418.539,12; y en junio trepó rápidamente a $494.080,98.
Al igual que ocurrió en los momentos más críticos de la pandemia de coronavirus, Alberto Fernández no congeló sus sueldos ni los de sus ministros. Esto significó un aumento de unos 150.000 pesos en apenas seis meses.
Con movimientos similares se vieron beneficiados la veintena de ministros que acompañan (o acompañaron) a Fernández en esos meses de gestión: en diciembre del año pasado cobraron un salario de $312.646 que en abril pasado aumentó a $343.911, en mayo llegó a $368.934 y en junio alcanzó los $435.509.
Entre diciembre del 2020 y julio último, los ministros recibieron 122.000 pesos de aumento.
Fuente: MDZ