*Por el Equipo de Investigación de EL FEDERAL ONLINE

Los nombramientos de familiares de Clara Vega en el Senado son un secreto a voces, un tema que muchos conocen puertas adentro por su obscenidad. Esta investigación muestra, por primera vez, los nombres de los siete protagonistas de esta historia de nepotismo y despilfarro del dinero del Estado.

El primer dato que surge del relevamiento realizado por EL FEDERAL ONLINE es que de los 9 empleados en planta transitoria asignados al despacho de Clara Vega, el 44% son familiares.

Lautaro y Lucas Ibáñez son hijos de Clara Vega, según consta en su declaración jurada. Tres fuentes confirmaron que las personas designadas son efectivamente ellos y todas coincidieron en que no cumplen ninguna función. Serían ñoquis.

Lucas Exequiel Ibáñez está nombrado en planta transitoria, con la categoría A-22, es decir, con una sueldo bruto total de más de 226 mil pesos. Este medio no pudo corroborar cuál es su ingreso concreto, ya que a esa cifra se le aplican descuentos, pero se puede ver incrementada por encima de un 30% si se cumplen determinados requisitos, como antigüedad o ciertos títulos.

Lautaro Emmanuel Ibáñez figura también en planta transitoria, en la categoría A-7, que tiene un salario bruto de más de 110 mil pesos. Según las fuentes consultadas, fue recientemente nombrado a partir de las negociaciones de Clara Vega para alejarse de Juntos por el Cambio y beneficiar a la Casa Rosada, como la vez que en diciembre se sentó en su banca para darle quórum al oficialismo o su reciente rechazo al proyecto de Boleta Única.

Una fuente dijo que Clara Vega también negoció con el oficialismo un cambio de despacho (“cualquiera puede ver la oficina que tenía antes y la que tiene ahora, por algo se la dieron”) y ayudas del Ministerio de Desarrollo Social para su ONG, la Fundación Yanapay. “Ella da sólo una pequeña porción de lo que recibe. El resto se lo guarda para entregar como dádivas en las elecciones o incluso usó chapas que le dieron para hacer un galpón en la casa de uno de sus hijos”, precisó una de las fuentes.  

La nómina de familiares de Clara Vega nombrados en la cámara alta sigue con Lucinda del Carmen Ibáñez, cuñada de la senadora, hermana de su marido, quien según las fuentes pidió licencia en APOS. En los registros oficiales aparece en la categoría A-3, con un sueldo bruto de más de 191 mil pesos. Es, según coinciden las fuentes, la única familiar directa que efectivamente trabaja y suele viajar a la Ciudad de Buenos Aires.

La lista de familiares nombrados como empleados de planta la cierra la nuera Mercedes Tores Almonacid, pareja de Lautaro Ibáñez, con un sueldo bruto de más de 96 mil pesos.

Antes de continuar, una aclaración. La práctica del nepotismo no es una novedad para Clara Vega. De las cuatro personas mencionadas hasta aquí, tres eran parte de su personal en la época en la que estaba en la Cámara de Diputados.

Lo que llama mucho la atención es la edad que tenían en esa época Mercedes Tores Almonacid y Lucas Ibáñez. Por sus documentos, ella tendría hoy alrededor de 29 años y él, 32 años, por lo que hace más de 6 años, cuando Vega asumió en la Cámara de Diputados, eran muy jóvenes, tal vez con muy poca o nula experiencia laboral como para acceder a semejante cargo y responsabilidad. El otro punto es que ninguno estudiaría carreras vinculadas a la política.

Hay otros tres casos de familiares de Clara Vega con contratos de locación de servicio, que la página web de la Cámara de Senadores no precisa a qué despacho fueron designados. Su salario está compuesto por una determinada cantidad de módulos, cada uno de los cuales es de 315 pesos. Por ejemplo, 300 módulos son casi 95 mil pesos.

Una de las personas beneficiadas con esa modalidad de trabajo es la otra nuera de Clara Vega, Antonella Stivala, novia de Lucas Ibáñez. Tiene asignados 222 módulos, que equivalen a unos 70 mil pesos mensuales.

La lista la cierran quienes serían la sobrina de Clara Vega y su pareja. La primera es Brenda Anahí Vega, quien según las fuentes, es la persona que figura en los registros oficiales como “Del Valle, Vega”, con 337 módulos (casi 100 mil pesos). Y Darío Agüero, con 443 módulos (casi 140 mil pesos).

Por lo demás, tiene otras 10 personas asignadas a su despacho que son planta permanente del Senado.

Hay algunos nombres que también, según las fuentes, son sospechosos, pero este medio no lo pudo corroborar de manera independiente. Esto incluye, por ejemplo, el contrato de su marido, hoy jubilado, Elpidio Ibañez, como empleado externo cuando Vega era diputada, o la pareja de la persona que maneja la Fundación Yanapay, contratada actualmente en el Senado.

EL FEDERAL ONLINE se comunicó con el equipo de prensa de Clara Vega y le hizo llegar esta información, con la aclaración de que la senadora iba a tener el espacio que quiera en este artículo para hacer las precisiones o comentarios que considere pertinentes. Hasta el cierre de esta nota no contestó.