El presidente Alberto Fernández protagoniza su gira oficial por Estados Unidos, que incluirá mañana su participación en la Asamblea General de las Naciones Unidas, en Nueva York. Lo acompaña una comitiva reducida, de solo nueve funcionarios incluida su mujer y primera dama, Fabiola Yañez, aunque el total de la delegación, sumados los rubros de “seguridad y apoyo”, alcanza al menos las 48 personas.

En principio, Fernández llegó a la ciudad norteamericana en un vuelo chárter de Aerolíneas Argentinas junto a Yañez, el canciller, Santiago Cafiero, el secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello, la portavoz Gabriela Cerruti y el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández. Allí se sumó, además, el embajador argentino en Washington, Jorge Argüello.

Desde el Gobierno afirmaron a LA NACION que esta es la “comitiva más reducida” en lo que va del mandato del Frente de Todos. Aunque a esos nombres habría que sumarles, según documentos oficiales, otros 39 integrantes de la “delegación”, que incluyen personal de ceremonial, custodia, prensa y comunicación y hasta la asistente personal de Yañez, Carolina Marafioti.

Carolina Marafioti, la asistente personal de Fabiola Yañez

En el caso de Marafioti, la estilista y asesora de vestuario que suele acompañar a la primera dama participó de la fiesta de cumpleaños de Yañez en la quinta presidencial de Olivos que dio origen a una causa judicial por la violación de la cuarentena fijada entonces por el Poder Ejecutivo. A través de su abogado, Alejandro Rúa, Marafioti ofreció en marzo donar $200.000 a un hospital para quedar sobreseída en la causa, en lo que fue el primer acuerdo judicial para cerrar el caso.

Fuentes de la Casa Rosada evaluaron que, en comparación con otros viajes, “la delegación es reducida para un viaje a la ONU y luego a Houston”, donde habrá un encuentro con empresas petroleras, una reunión similar a la que sostuvo el ministro de Economía, Sergio Massa, en su reciente gira por ese país.

Once personas para prensa y difusión

Además de la delegación de prensa, que incluye a 11 personas entre fotógrafos y personal de comunicación en distintas plataformas, otros 12 funcionarios de Casa Militar y custodias presidenciales están participando del viaje.

Fuentes del Gobierno recordaron que se trata de una práctica “habitual” y que la seguridad se coordina con las casas militares de otros países, a fin de amar las “cápsulas” presidenciales y negociar el número de vehículos de la misma.

Los enviados de Casa Militar, encargada de la seguridad del Presidente, se encargan, junto con el agregado militar, de la custodia de la aeronave en tierra y los desplazamientos a las diferentes locaciones que visiten los mandatarios, con revisión de explosivos para los autos incluida. En el caso de que viaje la primera dama, tienen “cápsulas” distintas y se duplica el personal de seguridad, explicaron las fuentes oficiales.

Las salidas al exterior de funcionarios son, por estas, motivo de discusión y debate en distintos países. En el caso de Perú, el presidente Pedro Castillo debió pedir permiso al Congreso de su país para llagar a New York por acusaciones de corrupción que pesan sobre su gestión. En su caso, la comitiva directa que lo acompaña es también reducida (seis personas incluida su esposa) más otros nueve de personal de seguridad, Casa Militar y comunicación.