Durante la jornada de ayer, se dieron a conocer los resultados de las respectivas autopsias realizadas a los jóvenes que fueron encontrados sin vida en una casa abandonada por Ruta N°5. El informe indicó que se trató de suicidio y, según las pericias, lo habrían planificado hace días.

Tal como se adelantó en la edición de ayer de este matutino, las autoridades provinciales investigaban la muerte de dos jóvenes, de 26 y 25 años de edad, cuyos cuerpos fueron encontrados en una casa abandonada, situada por la calle de ingreso a Las Parcelas, sobre Ruta Provincial N° 5, a la altura del kilómetro 8.

El triste hallazgo lo concretó, alrededor de las 8:00 en la mañana del domingo último, un trabajador rural que se encontraba en el lugar para realizar tareas de riego, cuando notó algo extraño en dicho domicilio, por lo que se acercó y vio a las dos víctimas, tratándose de un hombre y una mujer.

Rápidamente, tomaron intervención las Fuerzas Policiales y se le dio participación a la Policía Técnica Judicial. Poco después, se pudo conocer que la mujer se desempeñaba como cabo en la Policía de la  Provincia. En primera instancia, fue mucha la incertidumbre y más las dudas que certezas, por lo que se inició una investigación para esclarecer lo sucedido.

Finalmente, según pudo saber en base a un parte oficial con los resultados de los estudios, se trató de un suicidio, en ambas víctimas y las pericias a los teléfonos habrían establecido que llevaban aproximadamente una semana planeándolo. Importante conocer el suicidio es tema de salud, el cual requiere un abordaje comunitario y responsable. Desde el Ministerio de Salud recomiendan como un factor esencial, conocer los signos de alerta, como lo son: aislamiento; persistencia de ideas negativas; dificultad para comer, dormir y trabajar; desesperanza; llanto inconsolable; repentino cambio de conducta.

Ante estos indicios, es importante acompañar a la persona, mostrando interés y apoyo, respetando sus diferentes expresiones de sentimientos, y eliminando prejuicios. El suicidio no es ni “bueno” ni “malo”, tampoco un hecho delictivo, es una situación de sufrimiento.

El diálogo no debe ser un interrogatorio, sino que se debe compartir un momento. Si la persona no accede a realizar un tratamiento, no hay que obligarla, sino seguir apoyándola a través del diálogo y la compañía, mientras uno mismo realiza una consulta con un profesional de salud mental.

Si estás viviendo una situación difícil y/o preocupante, es importante saber que no estás solo/a, siempre podés acudir a tus amigos, a tu familia y a personas de tu entorno, sino, también podés acercarte a cualquier centro de salud, al hospital, escuela, universidad, club, trabajo o con quien sientas confianza.

Los teléfonos de asistencia son 08003451435. En casos extremos, podés llamar al 911 o al 101.