El gobernador riojano, Ricardo Quintela, fue tajante durante la campaña: si ganaba Javier Milei, él iba a renunciar porque no podía depender de la “discrecionalidad” de alguien con “inconsistencia emocional”. Sin embargo, ahora se desdijo. Después de felicitar al libertario cuando venció en las urnas, este martes el mandatario provincial aseguró que continuará al mando del Ejecutivo.
“Voy a seguir en el cargo. La decisión de mis compañeros y mis ciudadanos la vamos a defender a ultranza”, sostuvo en diálogo con los medios al llegar a la sede del Banco Provincia, donde se reunirá con sus colegas del Partido Justicialista (PJ).
Dijo también que en el actual oficialismo esperan tener una oposición “responsable, dialoguista y colaboracionista” para así “sacar el país adelante” cuando gobierne el libertario, que asume el 10 de diciembre. “Hay cosas en las que podemos estar de acuerdo y cosas en las que no, las vamos a manifestar con fundamentos sólidos”, marcó.
En medio de las expresiones de algunos gobernadores electos de Juntos por el Cambio, como el de Chubut, Ignacio Torres; y el de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, de que no podrán pagar el aguinaldo a fin de año, Quintela llevó tranquilidad a los empleados públicos de La Rioja. “Estamos en condiciones de pagarlo producto de que hemos ahorrado la plata para poder pagar, con fondos de la provincia”, indicó.
Sí se mostró preocupado por el supuesto recorte en la obra pública que vendrá con la gestión de Milei. “Tenemos un problema, que nos quedamos con 5600 familias en la calle sin su trabajo, de la Uocra. Los delegados están preocupados porque están recibiendo telegramas de suspensión o de despido”, adelantó el gobernador.
Sin embargo contó que el futuro ministro del Interior, Guillermo Francos, los contactó para establecer “vínculos” y que él lo puso al tanto de la situación de su territorio. De momento evitó opinar sobre el paquete de reformas que enviará Milei al Congreso ya que dijo que primero deben conocerlas para analizarlas.
Se mostró cauto también Quintela cuando aseguró que no iba a dar una visión personal sobre el pedido del intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray, para que Alberto Fernández y Máximo Kirchner renuncien a la conducción del PJ nacional y de la provincia de Buenos Aires. Convencido de que al tema lo trataría con el resto de los mandatarios provinciales, indicó: “Eso lo decidirá el Presidente, creo que él va a tomar la decisión, no puedo opinar por él”.
En tanto, negó que Axel Kicillof -quien convocó al mitin- vaya a ser “la cara” de los gobernadores peronistas. “La mesa es horizontal, vinimos al BaPro porque invitó acá”, sentenció, en medio de la nueva restructuración de fuerzas y liderazgos luego de las elecciones.
La Nación