El evento fue desarrollado con la participación de miembros de pueblos originarios de la zona en San Juan, quienes compartieron una fogata para llevar a cabo el ancestral ritual.
Valle Fértil vivió un momento especial este fin de semana, con la celebración de la tradición ancestral “Inti Raymi” o “Fiesta del Sol”. Durante el festejo, decenas de miembros de pueblos originarios, vecinos y turistas se reunieron en torno a una fogata para realizar el ritual que dejó hermosas postales que fueron compartidas por el municipio.
El “Inti Raymi” es la celebración que marca el nuevo año para los Pueblos Originarios, consiste en despedir al Sol del viejo año en el ocaso y recibirlo al alba con la fuerza del fuego, como rogativa por un año próspero para el Buen Vivir.
Una ceremonia cargada de espiritualidad y respeto, donde se dió inicio al año 5532 según el calendario de las comunidades andinas.
El Inti Raymi
Pachacútec, quien fuese el encargado de ordenar la construcción de Machu Picchu, instauró esta celebración alrededor de 1430 y, a pesar de haber sido prohibida por el Virrey Francisco de Toledo con la llegada de los españoles, en 1944 Faustino Espinoza Navarro, a través del relato del Inca Garcilaso de la Vega, se encargó de escribir, dirigir y representar la reconstrucción de la celebración del Inti Raymi.
En la actualidad para conmemorar la festividad, un centenar de actores utilizando vestimenta típica Inca, se reúnen en la Fortaleza ceremonial de Sacsayhuamán y realizan una representación de lo que en un comienzo fue la invocación del sol por parte del Inca.
Cercano a los días del solsticio, la luz amable del invierno llega a lugares profundos en los hogares, lugares en los que sólo permanecerá un breve tiempo, pero será suficiente para todo el año. La visita del padre sol con su luz vivificante es siempre una señal de alegría y de inicio, ya que a partir del 24 de junio, día de la celebración del Inti Raymi, cada día que pase, sumará unos minutos de luz del Sol, haciendo progresivamente más largos los días.
Ese momento sagrado representa la semilla de lo que ocurrirá durante el resto del año y por eso los chamanes expertos realizan profecías sobre el porvenir, según la forma y el color del cielo en el amanecer y las manifestaciones de la naturaleza que acompañen el alba.