El fiscal Gerardo Pollicita impulsa una acción penal en la causa número 2104/2024 tras revelar un escándalo relacionado con la adquisición de yerba mate no apta para el consumo humano.
La denuncia presentada por Leila Daniela Gianni, subsecretaria Legal del Ministerio de Capital Humano, expone la compra de doce millones de paquetes de yerba mate de un kilo que no cumplieron con los estándares de calidad y seguridad.
El valor de la transacción asciende a $18.224 millones.
El fiscal Pollicita, en su requerimiento de instrucción, manifestó que la adquisición de yerba mate se realizó “sin garantizar la seguridad y los controles sanitarios correspondientes”. Esta irregularidad apunta a una posible defraudación contra la administración pública y abuso de autoridad.
La denuncia, presentada por Gianni, señala a varios ex funcionarios públicos y empresas implicadas. Entre ellos se encuentran Victoria Tolosa Paz, ex ministra de Desarrollo Social; Agustín Rossi, ex jefe de Gabinete; y Leonardo Moyano, ex secretario de Articulación de Política Social.
El “Dictamen de Evaluación de Ofertas” tuvo lugar el 18 de septiembre de 2023 y fueron beneficiadas la distribuidora Compañía Comercial Mayorista S.R.L, quien suministraría yerba “marca El Buen Ojo”; Yerbatera Kleñuk, de Ignacio Kleñuk, a quien se le compró yerba mate elaborada con palo de la misma marca; y a la empresa de Hugo Oscar Holowaty, a quien se le compró el producto que elaboraba “Sierra del Imán”.
Según la denuncia, estos funcionarios públicos habrían permitido la adquisición de yerba mate que contenía sustancias nocivas como “parénquima, parénquima lagunoso y cristales de oxalato de calcio”, las cuales son peligrosas para el consumo humano.
El proceso de adquisición de la yerba mate se realizó eludiendo los controles del Instituto Nacional de Yerba Mate (INYM), delegando la evaluación técnica a la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM). Según Gianni, esta casa de estudios tiene “un vínculo económico y político con las autoridades del ex Ministerio de Desarrollo Social”.
La denuncia destaca que la yerba mate adquirida estaba en mal estado, como lo confirmaron varios informes de auditoría.
Por ejemplo, un informe de la Bioquímica Raquel María Fretes concluyó que la yerba “no se ajusta a los parámetros establecidos por la IRAM 20531:2015”.
El fiscal Pollicita ha solicitado varias medidas para avanzar en la investigación, entre ellas:
Solicitudes al Ministerio de Capital Humano para remitir antecedentes y detalles sobre las auditorías realizadas.
Investigación sobre Proveeduría Integral MC SRL por otra licitación direccionada.
Pericia Técnica Urgente sobre la yerba mate cuestionada para determinar su aptitud para el consumo humano.
Además, se ha pedido resguardar el material objeto de investigación y ordenar otras medidas que el juez estime necesarias.
Según los denunciantes, “este escándalo pone en evidencia las graves irregularidades en la adquisición de productos destinados a la asistencia social durante la gestión del gobierno de Alberto Fernández”.
Yerba
Desde el Instituto Nacional de Yerba Mate (INYM) habían advertido que la mercadería adquirida por el Ministerio de Desarrollo Social “mostraba signos de estar adulterada”.
Incluso un año antes de la compra, cuando se hizo público que las empresas de Kleñuk y Holowaty habían ganado la licitación pública, para “atender a la población en situación de vulnerabilidad”, los funcionarios del INYM advirtieron que “la mercadería mostraba signos de estar adulterada”.
“Enviamos los paquetes a analizar. Queremos que se analice palo, sustancias extrañas, contaminantes, todo tipo de componentes que tenga ese paquete. Es yerba que el Estado compraba para los más humildes. Esto es un alimento, no podemos darles esta basura”, indicó en aquella oportunidad Marcelo Hacklander, funcionario del organismo. De esa manera, desde el instituto se les aconsejó a las autoridades nacionales “analizar toda la mercadería antes de distribuirla para su consumo”.
Sumado a esto, Cristian Klingbeil, ahora expresidente de la Asociación de Productores Agropecuarios de Misiones (APAM), había manifestado al medio Bichos de Campo: “Nosotros denunciábamos que la yerba comprada era de mala calidad”. “Se mezclaba té, yuyo y un poquitito de yerba. Es más, tuve la oportunidad de ver uno de esos paquetes de mercadería, porque a uno de nuestros obreros se la dieron, y había que tener coraje para tomar eso. Nosotros que estamos en la actividad enseguida nos damos cuenta de que hay cosas raras”, explicó.
Fuente: Contexto