Durante su visita al departamento General Ocampo, el gobernador Ricardo Quintela volvió a destacar el rol del Estado frente a las políticas implementadas por el gobierno nacional.
En ese marco, realizó un repaso de las actividades llevadas adelante desde el día anterior, entre las que incluyó la entrega de equipamiento para escuelas secundarias del departamento Arauco, viviendas del Plan Angelelli, la reapertura de una sede del Banco Rioja y la inauguración de una nueva perforación. “En todas esas actividades estuvo la mano del Estado”, afirmó. “Fue el Estado el que propició y generó las condiciones para que esas familias pudieran estar un poco mejor”.
En ese sentido, Quintela instó a reflexionar sobre el sentido del voto y el rol de los gobernantes. “Es importante que nos preguntemos para qué sirve un presidente, para qué sirve un gobernador, para qué sirve un intendente”, dijo. Y se interrogó: “Cuando la gente vota, ¿para qué vota? La gente vota para que le generen condiciones diferentes en términos positivos; para que le generen oportunidades, para que puedan acceder a una calidad de vida que al momento de votar no tenían. La gente vota para estar mejor, no peor”.
Además, remarcó la necesidad de fortalecer el compromiso democrático. “Cuando vamos a los departamentos y tenemos la oportunidad de hablarles, pedimos que nos ayuden a clarificar lo que significa ejercer el derecho constitucional de emitir un sufragio, donde elegimos a los candidatos que nos van a representar y a quienes van a tener la responsabilidad de administrar los recursos en beneficio de la gente”.
Críticas al gobierno nacional
Desde esa mirada, el gobernador riojano cuestionó duramente las políticas del presidente Javier Milei. “En 16 meses que lleva en el ejercicio del poder el actual presidente con todo su equipo, ¿cuáles fueron las políticas que aplicó en beneficio del pueblo argentino?”, planteó. Si bien reconoció una baja en la inflación, advirtió: “¿Pero a costa de qué? Bajó la inflación a costa de paralizar los fondos para la provincia. A esta provincia de La Rioja le deben 850 millones de dólares de coparticipación y este es el único presidente que no lo reconoce. Hasta Macri lo reconoció, lo reconoció De La Rúa, que no eran del mismo signo político de quienes gobernaban la provincia”.
En ese tono crítico, apuntó también contra las decisiones en materia de salud y educación. “¿Ustedes conocen que se haya inaugurado algún hospital, alguna sala de primeros auxilios en 16 meses o que se haya terminado un hospital que había comenzado el gobierno anterior?”, preguntó. Y recordó que Nación detuvo el financiamiento del hospital de Chilecito, “un hospital modelo, de alta complejidad, que iba a atender a casi 120 mil personas del oeste riojano”.
La preocupación del mandatario se extendió también al área de seguridad. “¿Saben si el presidente entregó un vehículo o el equipamiento necesario para que la policía pueda brindar un buen servicio en las provincias argentinas? No, lo único que hizo fue armar un esquema represivo para pegarle a uno de los sectores más vulnerables de nuestra sociedad”, afirmó, en referencia a los jubilados.
Quintela denunció además la quita de beneficios para la niñez: “Quitó los comedores escolares, la copa de leche y cerró todos los comedores infantiles en Argentina”. Y agregó: “El gobierno nacional atacó a los dos extremos. ¿Conocen a un jubilado que pueda vivir con 340 mil pesos cuando tiene que utilizar la mayor cantidad de sus recursos para poder mantener los años de vida que le quedan en las mejores condiciones de salud posible? Esto es lo que tenemos que poner en debate, en discusión”.
“No hay que votar con odio”
Frente a este panorama, el gobernador riojano volvió a reivindicar el papel del Estado. “La obra pública es necesaria”, insistió, y planteó: “Hay que preguntarnos para qué está el Estado, para qué sirve el Estado. No está para castigar a nuestra gente con una actitud genuflexa ante los poderosos y una actitud dictatorial, agresiva e insultante ante la sociedad argentina. Eso es lo que nos diferencia de este