Desde la vicegobernadora de Mendoza, Heve Casado, hasta otros sectores libertarios, miran a los primos Menem como una mala influencia para el presidente después de perder en la elección bonaerense. Hay más repercusiones de las fuerzas opositoras en Mendoza.

«Delegar la política a las personas equivocadas trae consecuencias. Destratar a quienes quieren un país mejor también. Reciclar lo peor del pasado no es bueno. Están a tiempo de hacer lo correcto. Se los dice alguien apartidaria. Saludos cordiales».

Vicegobernadora de Mendoza, Heve Casado

Una derrota electoral nacionalizada como la que sufrió Javier Gerardo Milei en las elecciones de la Provincia de Buenos Aires ayer, domingo 7, se manifiesta con una onda expansiva y reducida. Y a veces la consecuencia intrínseca es la más notable, porque hace relucir sentimientos recónditos de quien menos se espera. Con la derrota del presidente ante el gobernador Axel Kicillof saltó el dolor de Hebe Casado por no poder sentirse libertaria con carnet. Su recriminación apunta a quienes no le permitieron afiliarse a La Libertad Avanza (LLA). Así de complejo es el microcosmo de Javier y su hermana Karina.

El reproche de la vicegobernadora de Mendoza difundida en X contiene una razón «valedera». El mensaje, escrito en clave contiene una acusación, apunta a quienes ella considera los culpables del fracaso ante el peronismo bonaerense por un claro 47 a 33 por ciento de votos.

Y por más que ella no es siquiera convidada de piedra de la hermandad presidencial, opina y apunta a los primos Martín y Lule Menem responsables de la campaña nacional del partido gobernante.

De hecho, son ellos los sobrinos de Carlos Saúl, aquel presidente peronista en dos periodos de los 90, los dueños del sello partidario, porque fueron ellos que inicialmente inscribieron a LLA como partido en La Rioja cuna de la estirpe Menem.

Casado, no se olvida de que fue Lule, precisamente, quien valló su ingreso al partido cuando intentó afiliarse tras renunciar al PRO. Lule es el consejero de Karina (ella es titular de LLA) y es la pieza influyente para definir las estrategias electorales en los distritos del país. A él y a Martín (vicepresidente de LLA y jefe de la Cámara de Diputados de la Nación) se refiere HC como responsables del resultado de la elección bonaerense. En realidad, Sebastián Pareja fue el comandante de la campaña en PBA, pero este dirigente responde a la dupla de primos riojanos. Pareja fue el primero en rendirse públicamente ante el escrutinio en contra.

Las miradas fulminantes van hacia los primos, porque hacia ellos van las sospechas de los libertarios marginados por los mismos Martín y Lule (en ese casillero de postergados está Casado). Los señalan de ejecutar maniobras fraudulentas induciendo o colaborando con Karina y JGM para concretar sobreprecios en compras públicas, cobro de peajes por entrevistas con el presidente, traficar influencias y otras yerbas.

De hecho de las otras expresiones libertarias consecuentes con Milei coincidieron con  este diagnóstico en las últimas horas después de la elección en PBA.

«El discurso y accionar de Milei es libertario. Pero en la composición de su gobierno está apalancado fuertemente en un menemismo rancio», finalizó.