“La Agencia la va a manejar Diego Spagnuolo, el abogado de Milei. Hay que llegar a Karina, ella define todo”. El 24 enero de 2024, a días de asumir el nuevo gobierno, cuatro personas debatían en un grupo de chat acerca de la necesidad de volver a desembarcar en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS), donde varios de ellos habían sido funcionarios durante el macrismo. Conocían el caudal de la caja que podían manejar, y presumían que los vientos propicios habían vuelto como para hacerse de ella. Karina Milei, “El Jefe”, era el puerto a llegar para lograr el objetivo.
Esta declaración y centenas de pruebas más que corroboran el plan aceitado que funcionó en ANDIS con la llegada del mejor amigo de Javier Milei a su dirección, y que él mismo expuso en los audios que el 19 de agosto se difundieron por primera vez en el programa Data Clave del canal de streaming Carnaval, se conocieron en la tarde del viernes cuando el fiscal Franco Picardi presentó su dictamen y el juez Sebastián Casanello ordenó la citación indagatoria a Diego Spagnuolo y a catorce personas más entre funcionarios, ex funcionarios y empresarios del sector farmacéutico, involucrados en una trama armada para cometer “graves hechos de corrupción” en la compra de medicamentos de alto costo que debían destinarse a personas con discapacidad.
Además, el fiscal pidió la detención de uno de ellos, Pablo Atchabahian. La investigación llegó también al proceso posterior al choreo: el lavado de esos activos que habría estado en manos de Alan Pocoví y de Sergio Mastropietro, el empresario de aviación que habría presentado a Fred Machado con José Luis Espert, en este juego en el que todo tiene que ver con todo.
El dictamen está muy bien documentado y es muy claro en su explicación. El titular de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N°5, en el marco del caso Nro. 158.564/2025 (CFP 3402/2025) caratulado “Denunciado: Milei Javier y otros s/defraudación por administración fraudulenta, estafa, asociación ilícita, cohecho, cohecho activo y negociaciones incompatibles”.
Y dice: “Estas acciones ilícitas se lograron llevar a cabo por acuerdos espurios entre, por un lado, funcionarios/as de la Agencia Nacional de Discapacidad (“ANDIS”) y, por el otro, personas del sector privado vinculado a las droguerías y prestadoras de medicamentos e insumos de alto costo y baja incidencia. Todas estas personas, de manera coordinada y de común acuerdo, integraron una organización delictiva a los fines de cometer ilícitos que les permitió obtener amplias sumas de dinero de manera indebida, en perjuicio de la administración pública y en particular del sector poblacional con discapacidad, y especialmente vulnerable que goza pensiones no contributivas y no posee otra cobertura de salud (lo que abarca a madres con 7 hijos, mayores de 70 años en situación de pobreza, entre otros).”
El método se implementaba en el Programa “Incluir Salud” y en la consecuente compulsa de precios del Sistema Integrado de Información y Administración de Prestaciones con Discapacidad (SIIPFIS), y específicamente en aquellas gestiones de compra de prestaciones de alto costo y baja incidencia, absolutamente discrecionales y direccionadas al conjunto de proveedores que, aliados con los funcionarios, eran parte del esquema donde quedaban evidenciados notorios sobreprecios que, al no ser compras por licitación -como marca la ley- nadie cuestionaba.
Cuando estalló el escándalo se quemaron dos fusibles: el primero y obvio fue el mismo Spagnuolo, responsable máximo de ANDIS desde diciembre de 2023 hasta agosto de 2025, que “renunció” silenciosamente al cargo y se recluyó en su casa del country de zona norte, acompañado solo por su máquina de contar billetes. El segundo fue Daniel María Garbellini, Director Nacional de Acceso a los Servicios de Salud de la ANDIS desde el 3 de junio de 2024 hasta el 21 de agosto de 2025 y que fungía como el dependiente que recibía órdenes y las ejecutaba en este plan de latrocinio a los más débiles.
Muchas de esas órdenes, como veremos, venían incluso de personas por fuera del organismo y que sin embargo decidían acerca de su funcionamiento. El fiscal sostiene: “mediante acciones concretas, ambos garantizaron que la ANDIS funcionara como una agencia al servicio del interés privado; todo lo cual es contrario a los fines de dicha entidad, especialmente pensada para diseñar e implementar políticas sociales para personas vulnerables.”
A diferencia de Spagnuolo, Garbellini no era la primera vez que trabajaba en ANDIS. Ya lo había hecho durante el macrismo entre 2018 y 2019 y por entonces tenía un jefe que ocupaba el cargo que luego él cubrió con la administración libertaria. Pablo Atchabahian quien, ya sin rol alguno dentro del organismo, sin embargo seguía operando desde fuera y daba las órdenes -que los demás cumplían- acerca de a qué laboratorios bajarle el pulgar y a cuáles favorecer, sobre todo a aquellos en los que él tenía algún tipo de participación o vínculo: Roche y Génesis. Atchabahian no solo había sido jefe de Garbellini; es hasta hoy su mejor amigo.
Pero nada de esto lo hacían solos. Dentro de ANDIS contaban con otros aliados como Luciana Ferrari. La mujer había sido Directora de Prestaciones Médicas del organismo también durante el macrismo, y actualmente trabaja en el laboratorio Roche S.A.Q.E.I. Ella era una operadora externa, puesto que sin estar designada en ANDIS, cumplía órdenes de Atchabahian y Garbellini, dentro de la agencia entre las que se incluían la gestión de facturación e ingreso al sistema operativo -algo que hacía de manera externa-, información anticipada acerca del llamado a compulsas, y de los acuerdos con otras droguerías.
El que sí es funcionario de la agencia es Matías Javier Palotti, que recibió órdenes de Atchabahian de “despedir gente sin piedad”. Se lo cuenta a Garbellini en un mensaje de audio: “Che, me acaba de escribir, sin piedad, lo más rápido posible, y quien va a traer la horda de abogados para representarnos, este, este parece puto con culo ajeno.”
Palotti habría desempeñado funciones anteriormente en la Municipalidad de Morón, en la Corporación Buenos Aires y en el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, donde habría compartido tareas con Garbellini. Luego, fue llevado por éste como asesor legal de la agencia nacional de discapacidad.
Como varios de ellos, Palotti también atiende del otro lado del mostrador: tiene aceitados vínculos con la Droguería Profarma, con la que también tiene relación otro actor preponderante de esta trama, figura mediática por otra de sus labores como representante del Instituto de Consumo Masivo, Miguel Ángel Calvete.
Calvete era un hombre de confianza de Spagnuolo y de Garbellini, al punto que solían reunirse socialmente en bares, restoranes y hasta en su propia casa. La presentación dice textualmente: “Miguel Ángel Calvete coordinó pagos y gestionó cobros para otras droguerías y firmas del rubro (como por ejemplo: Laboratorio Ortopédico Sagues S.R.L., Grupo Alemana, MED-EL Latinoamérica). De este modo, su rol era el de fungir como conector entre ANDIS y el sector privado vinculado a la salud. A su vez, fue uno de los encargados de gestionar numerosos pagos indebidos a diversos/as funcionarios/as de ANDIS.”
Calvete, un hombre de familia, compartía truchadas con su esposa, Guadalupe Muñoz, quien fue la encargada de proveer de varios millones en efectivo a Spagnuolo cuando concurrió a su casa con una mochila para guardar los billetes y que participaba activamente de la repartija de dinero de los laboratorios y droguerías al punto que era quien armaba las planillas. Miguel Ángel, su marido, le mandó un audio con algunas correcciones, que puede escucharse acá.
Spagnuolo recibió de parte de Calvete y Muñoz cinco millones de pesos argentinos ($5.000.000) en efectivo, para que el primero realizara un viaje. Esta información se desprende de una conversación mantenida entre Calvete y Muñoz, en la que este le pide a su pareja “cinco palos” en efectivo en pesos. Cuando ella le pregunta para quién es esa suma de dinero, Calvete le responde que es para: “El boludo del pelado que viaja a Israel y no tiene efectivo en pesos”. Finalmente el extitular de ANDIS no lo realizó, pero sí lo hizo Garbellini.
Ornella Calvete es hija de Miguel Ángel Calvete y funcionaria pública con el cargo de Directora Nacional de Desarrollo Regional y Sectorial de la Secretaría de Industria y Comercio del Ministerio de Economía de la Nación desde el 1° de septiembre de 2024.
El intercambio de mensajes entre padre e hija es profuso. El 10 de septiembre de 2025 Ornella Calvete insiste a su padre -agendado como “Carmela Vivaldi”- que intermedie con Claudio de Ortopedia Alemana, su padre le dice que ya concretó una reunión, a lo cual ella le desea éxitos y le dice que si todo sale bien le compra algo lindo, “una lambo, una granja, lo que quieras”. Por su parte, Miguel Ángel Calvete le responde: “No hace falta…con el 3% a KM está perfecto”.
Cuando el escándalo de las coimas ya se había hecho público, la hija vuelve a escribirle al padre, el 12 de septiembre de 2025, para contarle que en la planta baja -parecería ser de su vivienda- había quince policías y a continuación le dice: “No se si es por el cabeza de rodilla o que”. Luego de intercambiar stickers, Calvete le aconseja a su hija que “se haga la gila”. El 9 de octubre, cuando finalmente la justicia allanó la casa de Ornella, encontró 700.000 dólares en billetes que no pudo justificar ni haciéndose la gila; aunque unos días antes le había dicho al padre que se justificaría diciendo “que se la prestó alguien por si entran acá y me ven con la mossssca”.
Cuando Spagnuolo cae en desgracia, Calvete da la orden a Julio César Viera, quien era su mano derecha en la logística del dinero que bloquee al “pelado”; que borre con topitos el historial de llamadas y que a él lo ponga con un nombre chino.
Calvete describió buena parte de esta operatoria en cuadernos que se secuestraron en el allanamiento a su casa y en ellos aparecieron los nombres de Roger Grant, Eduardo Nelio “Pino” González y Lorena Di Giorno, entre otros.
Para Picardi, Calvete “operó como un verdadero director para-estatal de la ANDIS, ello a los fines de garantizar que el esquema de corrupción funcione en beneficio de las firmas que integran el entramado ilegal.”
Y agrega que se encargaría “del lavado del dinero obtenido en forma espúrea de la agencia de discapacidad, (que) sería ubicado en terceras firmas que no guardan en principio vinculación con el sector de las droguerías y firmas proveedoras de insumos de alto costo y baja incidencia. Miguel Ángel Calvete giraba dinero en forma reiterada a Sergio Mastropietro (Baires Fly S.A.) y a Alan Pocoví”
Roger Grant es Coordinador de Gestión de Urgencias de la Dirección Nacional de Acceso a los Servicios de Salud de la ANDIS y fungió como el ejecutor directo de los mandatos de Garbellini. Siempre según la investigación del fiscal, Grant le consultaba -y procedía de conformidad- en todo lo relativo a las contrataciones de medicamentos y sabía quiénes iban o no a cotizar; manejaba los tiempos del proceso; ejecutaba instrucciones sobre a qué droguerías dar o no de alta en el sistema; y se interiorizaba sobre quiénes habían “podido” cotizar.
Eduardo Nelio González es Director Nacional de Apoyos y Asignaciones Económicas de la Agencia Nacional de Discapacidad y fue designado recién en junio de 2015, sin embargo cumplía funciones informalmente desde mucho tiempo antes, al punto que hay numerosos mensajes intradepartamentales que dicen, por ejemplo, “consultalo con Pino”.
Lorena Di Giorno, quien también responde a Calvete pues fue su socia en diversos emprendimientos comerciales, realizaba pagos y diversos movimientos de dinero a personas físicas y/o jurídicas vinculadas al sector de las droguerías y empresas de insumos. De todo esto daba cuenta a Calvete, tal como consta en el intercambio de chats, y además solía pasar por la casa de la calle Defensa del empresario a llevar y traer dinero en cifras multimillonarias.
El 9 de octubre de 2025, cuando se llevaron a cabo los allanamientos en múltiples domicilios que incluyeron el de Calvete, él llamó a Lorena Di Giorno a las 17:44:
MAC: “Lore soy yo ¿cómo va?”
LDG: “¿quién habla?”
MAC: “Miguel. Escuchame, ahí fueron a lo de Coki también, no?”.
LDG: “Sí, sí, está todo tranquilo igual, despreocupate”.
MAC: “Pero pará. ¿Ahí a Nogoyá?”
LDG: “Sí”.
MAC: “¡A la mierda!”
LDG: “Sí, pero todo tranquilo ahí. No pasa nada. A mí casa no, saqué todo, no hay nada. Tranquilo.”
MAC: “Ok. Bueno, listo”
LDG: “Decime qué necesitás. Paré los pagos, solo pagué dos cosas tuyas personales y no se paga a nadie.”
MAC: “Fijate pedile un 25 % de descuento, un 25 o 30 y se le paga al contado cuando entra el pago, viste que tienen que entrar un montón de pagos”
LDG: “Pará, pero escuchame. Eso que está ahí, podríamos directamente que me haga un descuento y transferírselo ¿qué te parece? porque lo van a chupar”
MAC: “¿cuál decís?”
LDG: “No se pudo pasar a ningún lado”
MAC: “¿No pudo moverlo?”
LDG: “No. ¿Qué hago? No sé qué querés hacer”
MAC: “Ahí hablé con Patricia para que lo transfiera”
LDG: “¿A dónde?”
MAC: “A Baires, a una buena”
LDG: “No se puede a lo de Piero”
MAC: “¿por? ¿porque hay quilombo”
LDG: “dijo que no”
MAC: “Ah ok. Bueno, entonces hacele, pedile un descuento y…”
LDG: “yo por las dudas de que la…no. No sé, porque no sé otro lugar.”
MAC: “Déjame que lo llamo y te llamo”
LDG: “Bueno, pero vos cómo estás?”
MAC: “Bien, bien, todo bien, vos despreocupate. Para que le voy a decir a Alan, para que lo llame a Alan. chau, chau”
El rol de Alan Pocoví y Sergio Mastropietro
Alan Pocoví, hijo del empresario mileísta Marcelo Pocoví y quien fue además pareja de Zulemita Menem y padre de su hijo más pequeño sería, según la investigación, uno de los responsables del blanqueo de los capitales producidos por el latrocinio en ANDIS. De las transferencias se encargaba Calvete, algo que se desprende de los mensajes de Whatsapp que intercambiaban profusamente. Allí se advierte que movilizaban en forma regular importantes sumas dinerarias en moneda local y estadounidense, y que parte de los fondos recibidos por Pocovi serían invertidos en criptomonedas mediante la aplicación “NEBLOCKSHAIN” .
El otro responsable del blanqueo sería Sergio Mastropietro, también parte del entramado ilegal. Vale recordar que Mastropietro, de larga trayectoria en el grupo SOCMA de la familia Macri, y responsable de líneas de aviación, fue quien entre otras cosas presentó al caído en desgracia José Luis Espert con el narcolavador Fred Machado. Mastropietro fue dos veces a visitar a Spagnuolo en su casa del lote 180 del barrio privado “Altos de Campo Grande”.
Lo hizo el 30 de marzo y el 3 de mayo de 2025 y coincidió allí con Calvete y con su esposa. ¿Habrán usado la máquina de contar billetes que Spagnuolo compró solo porque estaba en oferta en el Coto de Pilar? Calvete y su esposa, además, visitaron al “Pelado” en cinco oportunidades más entre junio de 2024 y mayo de 2025.
Pocoví y Mastropietro también figuran en un listado de los cuadernos de Calvete. El 25 de agosto de este año, Calvete le envía un mensaje a la línea agendada como “Sergio M”, en la que le dice: “Serginho…Nos manejamos por este”. Por su parte, Mastropietro el día 27 de agosto le envía una imagen con información de una cuenta bancaria a nombre de Baires Fly S.A. empresa con la que está vinculado. Baires es, sin dudas, la empresa a la que referencia Calvete en su conversación con Di Giorno que mostramos previamente.
El 10 de septiembre, y luego de profusos intercambios comentando el devenir de la investigación en ciernes, Mastropietro y Calvete intercambian información de dinero. Calvete le envía cinco archivos que contienen transferencias dinerarias por cientos de millones de pesos argentinos a Baires Fly S.A. por parte de las firmas Prolite Orthopedics S.R.L., Probock S.R.L. y Droguería Profarma S.A.
En forma inmediata, Mastropietro le remite tres archivos adjuntos que contienen las siguientes facturas emitidas por la firma Baires Fly S.A. a Prolite Orthopedics S.R.L., Probock S.R.L. y Droguería Profarma S.A., por los mismos montos transferidos, por el siguiente concepto: “POR COMPRA DE KILÓMETROS NACIONALES PARA SER UTILIZADO EN AERONAVES DE LA EMPRESA” para disimular el origen de los fondos.
Las droguerías
Cuatro empresas fueron las principales receptoras de amplias sumas de dinero de manera indebida. Droguería Profarma S.A , Drogueria Génesis S.A., Droguería New Farma S.A. y Droguería Floresta S.A. Estas cuatro droguerías, en acuerdo con las autoridades de ANDIS, alternaron ganancias y recibieron sumas millonarias de manera permanente, durante el periodo investigado.
El director suplente de Droguería New Farma es Patricio Rama, un ex funcionario del Ministerio de Desarrollo Social -hoy “Capital Humano”-, quien también tiene vinculaciones con Génesis que dirige Andrés Horacio Arnaudo. Rama y Arnaudo son amigos entre sí y a su vez de Calvete y Atchabahian, que también tiene vinculaciones con esa droguería. Como será de estrecha la relación que la Droguería Génesis adquirió una camioneta importada marca Chevrolet Silverado, dominio AH062DD, y emitió dos cédulas de autorización a conducir a nombre de Pablo Atchabahian y Patricio Rama.
A su vez las droguerías New Farma S.A. y Droguería Floresta S.A. se encuentran vinculadas entre sí a partir de la composición de sus respectivos directorios y presidencias. Alejandro Gastón Fuentes Acosta, es el Presidente de Droguería Floresta S.A. y su pareja Silvana Vanina Escudero es la Presidenta de New Farma S.A. y, hasta septiembre de 2024, ocupó el cargo de Presidenta de Droguería Floresta S.A. Asimismo, el 4 de noviembre de 2021, Patricio Rama le compró el 50% de las acciones de la Droguería New Farma S.A. a Escudero, quien continúa en la firma.
Pablo Atchabahian -sin formar parte de ANDIS y como gerente de Roche S.A.Q.E.I – se ocupaba de manera personal de obtener los certificados para dar de alta a la Droguería Disval S.R.L, cosa que se desprende de un chat entre él y Garbellini de noviembre de 2024. En la misma fecha y del mismo modo, conmina a Garbellini a que “invite” a la Droguería 20 de Julio a ser parte de las compulsas. Garbellini indicó entonces a Roger Grant que incluyera a Droguería 20 de Junio S.A., lo que sucedió el 19 de noviembre del 2024. Matias Litvanovich es Director Titular de la Droguería, quien el 25 de abril de 2025 y según el libro de visitas del Country, fue hasta la casa de Jonathan Kovalivker, el responsable de la Suizo Argentina y quien distribuiría los sobres de recaudación de coimas.
Del mismo modo Atchabahian era quien decidía a que empresas “castigar” si no hacían lo que pretendía, y ordenaba a Garbellini qué hacer con ellas; eso sucedió con Dhiemo, por la que pidió a que no le pagaran en tiempo y forma, porque “están jugando mal”.
Ese mismo día, el 13 de junio de 2024, escribió una lista a mano para que no queden dudas de qué hacer con cada droguería y vuelve a la carga con Dhiemo, y además suma el nombre de su responsable, Leandro López, al que adjetiva como “bocón”. Sebastián Nuner Uner sería el nexo entre la Droguería Suizo Argentina y ANDIS, y un vector imprescindible en los negocios que manejaba la familia Kovalivker con quienes todos mantenían algún tipo de contacto.
De más está decir que cada compulsa la ganaban, siempre, estas droguerías. La selección de las mismas no fue antojadiza sino que fue el resultado de un plan que tuvo por fin único la cartelización y el direccionamiento de los pagos, principalmente hacia las Droguerías Profarma S.A. y Génesis S.A., quienes resultaron adjudicatarias del 93,11% de este tipo de procesos de selección acotados.
No puede olvidarse en este universo de conexiones que Calvete es socio gerente y accionista mayoritario de INDECOMM S.R.L., donde Ruth Noemí Lozano es accionista minoritaria, quien a la vez figura como presidenta y accionista principal de Profarma S.A. De este modo, se advierte una interdependencia entre ambas sociedades, que funcionaban de manera complementaria en la provisión de medicamentos e insumos y en la gestión de cobros ante ANDIS, articuladas bajo la dirección de un mismo grupo de control.
El grupo “Museo”
El 15 de febrero de 2022, cuando aún Javier Milei era solo un diputado en campaña, Garbellini, con nostalgia de su paso por la función pública, creó un grupo de WhatsApp al que llamó “Museo”, y que integraban Patricio Rama (Pato Country), Mariano Caballi -amigo de Calvete-, Matías Palotti y Pablo Atchabahian. Tan amigos son -o eran- que se describían como “familia”. Desde entonces, se dedicaban a rosquear políticamente con diversos candidatos para encontrar un nicho, luego de las elecciones, en donde volver a la función pública.
Hablan de contactos con Facundo Manes, con quien dicen “está todo perfecto”, y con Jorge Macri, con quien aparentemente se reunieron luego de las negociaciones de un tal Helio Rebot, exlegislador de la ciudad de Buenos Aires por el PJ, luego devenido en funcionario macrista, En uno de los chats Atchabahian (agendado como “Pablo Pilar”) dice: “Totalmente de acuerdo, Dani, hay que pedir. Yo estoy pidiendo el Pami y la Agencia” (por ANDIS).
Tan previsores fueron que un año antes de las elecciones, en diciembre de 2022, comentan: “Muchachos se nos viene un 2023 con mucho trabajo y es el trampolín para el 2024 en la gestión todos juntos. Gracias por estar juntos y construir lo que todos queremos. 4 años más de gestión. Después todos a Tenerife”.
Un año después, ni bien asume Milei, la ansiedad es manifiesta en el grupo, del mismo modo que queda claro que ya entonces sabían perfectamente quién era quién en el nuevo gobierno. En enero de 2024 dice Mariano Caballi:
“La Agencia la va a manejar Diego Spagnuolo, el abogado de Milei. Hay que llegar a Karina Milei, ella es quien define todo”
El 3 de junio de 2024, cuando Garbellini asume como Director Nacional de Acceso a los Servicios de Salud, en ANDIS, Patricio Rama envió una imagen galáctica al grupo, con el texto: “Se alinearon seis planetas en el espacio”.
Sin embargo, desde el 19 de agosto parece que el grupo entró en Mercurio retrógrado y las cosas dejaron de ser tan amables para ellos. La celeridad de la justicia y su buen desempeño hasta ahora demuestran que esta aceitada maquinaria de choreo empezó a fallar desde el momento en que la avaricia y el “jetoneo” de uno de sus mayores responsables, quizá pensando que era impune, se dio de bruces contra interlocutores que decidieron grabarlo y exponerlo en los medios. ¿Será el fin de una etapa en que los discapacitados, el sector más vulnerable entre los caídos del sistema, sean avasallados en sus derechos?
