*Por Ángel Flores
La noticia que trascendió a nivel nacional se multiplicó en las redes sociales. La intendenta la localidad riojana de Chamical, Dora Rodríguez, decidió regalar 3 kilos de asado a cada uno los empleados municipales por el Día del Trabajador. “Es un negociaodo de más de 5 millones de pesos y se compró a $1.200 el kilo”, dijo una fuente de EL FEDERAL.
En un principio la noticia causó sorpresa entre los empleados municipales, pero con el correr las horas empezaron a circular versiones en Chamical de que la carne habría sido comprada a un concejal que tiene una carnicería, abriendo sospechas sobre la medida ordenada por la intendenta Dora Rodríguez. El tema se empezó a comentar entre la gente y este medio se hizo eco y decidión indagar.
Según la publicación de la intendenta, la entrega beneficia a 1.477 empleados, incluido los precarizados municipales que Dora Rodríguez mantiene cobrando sueldos miserables, y se realiaría en la mañana del sábado. La propia mandataria sugirió que se hizo con dinero que envió la Provincia.
El anuncio se realizó con varias autoridades municipales y con la presencia del concejal Miguel “Ñoqui” Abrati Carbel, a donde apuntaron todas las miradas, pues es dueño de la carnicería en la que se habría comprado la mercadería, según la versión que circula en Chamical y la información que brindaron por lo menos cuatro fuentes consultadas por EL FEDERAL, incluido personal del Municipio y un proveedor de otra carnicería.
De corroborarse, la compra de la carne a un concejal o a una persona de su confianza podría configurar un delito, por lo que EL FEDERAL decidió profundizar la investigación y consultar a sus protagonistas.
En primer lugar, hubo silencio de luto desde el Municipio. La transparencia brilló por su ausencia. No se especificó el monto de la inversión ni se detalló a dónde se compró. Tampoco se brindó documentación que arroje un poco de luz.
LA PALABRA DEL CONCEJAL “ÑOQUI” CARBEL
EL FEDERAL habló con el concejal sospechado, quien negó rotundamente la información. “No, no, no fue vendida por mí, soy concejal y no puedo venderle carne al Municipio“, expresó.
Al ser preguntado por este periodista de cuánto es el monto de la inversión y a qué carnicería se compraron las casi 4.500 kilos de asado, el concejal respondió: “No te conozco, no te puedo dar esa información”.
El periodista le remarcó que esa información debería ser pública para los medios y los vecinos, y que él estuvo presente en el acto de anuncio de la intendenta Dora Rodríguez, por lo que tendría que saber el monto de la inversión y a dónde se compró la carne. Entonces, el edil cambió la versión. “No tengo esa información”, señaló.
Una de las fuentes consultadas municipales brindó detalles de cómo fue la operación. “La carne se bajó del camión y ya vino embolsada por la carnicería del concejal, pero hoy se le puso otra bolsa en la Municipalidad para la entrega. Son 16 animales que fueron faenados”, explicó. “Es un negocio de más de 5 millones de pesos, pues se compró a $1.200 el kilo”.
Posteriormente, el concejal Carbel mandó un mensaje de texto a EL FEDERAL, donde aclaró que la carne se compró en la carnicería “Falucho”.
EL FEDERAL trató de contactar a uno de los propietarios de la carnicería Falucho, llamado Juan Toledo, quien no respondió a las llamadas y los mensajes. Una versión no corroborada por este medio señalaba que sería íntimo amigo de Carbel, por lo que la “versión oficial” sumó más dudas que certezas y se espera que alguien en el Municipio se digne a mostrar la documentación y termine con el misterio.