Con Neymar a la cabeza, son 72 personas las que se hospedarán en pleno centro sanjuanino por el clásico con la Selección Argentina. Un menú de siete páginas, habitaciones remodeladas especialmente para las estrellas y un hotel bloqueado. Todos los detalles.
Desde su inauguración en 1992 que el Hotel Alkazar no vivía horas tan convulsionadas como las de ahora. No es para menos. Ser anfitrión de la Selección de fútbol de Brasil no es sencillo, mucho menos hacerles frente a los excéntricos requerimientos que tienen para hospedarse en el edificio de siete pisos ubicado sobre calle Laprida. Un menú que incluye hasta siete tipos de panes, camas matrimoniales, chef exclusivo (es sanjuanino) y otros exigentes pedidos para su estadía en San Juan, en la previa del esperado clásico ante la Selección Argentina.
Si bien el hotel estaba atravesando un proceso de remodelación interna y externa tras el parate ocasionado por la pandemia de coronavirus, la sorpresiva visita de la verdeamarela aceleró los trabajos e incluyó otros para cumplir con las expectativas de Neymar y compañía, todas estrellas del fútbol mundial. Serán 72 personas las que se alojarán en el hotel céntrico: además de los futbolistas y cuerpo técnico, llegarán auxiliares y dirigentes de la Confederación Brasileña de Fútbol.
El Alkazar abrirá sus puertas exclusivamente para Brasil. Es decir que, el lunes y martes, sólo podrán ingresar y salir del edificio el personal que integra el seleccionado, además de los empleados del hotel. Las reservas que tenían desde hace meses tuvieron que cancelarlas a partir de la confirmación de esta lujosa visita. “El hotel va a funcionar en formato burbuja, incluso todas las personas podrán entrar solo con credenciales e hisopados.”, explicó una fuente a Tiempo de San Juan.
Perlita: cada habitación deberá tener una bajada de internet de 100 megas, según lo solicitó la propia Selección.
Para asegurar la intimidad de los jugadores, todas figuras del fútbol europeo, habrá un estricto operativo de seguridad dentro y fuera del alojamiento. El mismo estará a cargo de la Policía de San Juan, que ocupará decenas de efectivos policiales para custodiar al combinado en su traslado del aeropuerto al hotel, del hotel al Estadio del Bicentenario y también mientras descansen en sus respectivas habitaciones previo al choque de Eliminatorias. Durante las horas que Brasil esté instalado en el parador sanjuanino, no habrá tránsito en calle Laprida, que sufrirá un corte desde calle Mendoza hasta General Acha.
Otra de las exigencias tiene que ver con las instalaciones. Curiosamente los directivos brasileros pidieron 72 habitaciones con camas King, es decir, matrimoniales. Las habitaciones serán individuales, a diferencia de la Selección Argentina, que suele agrupar a sus futbolistas de a dos. Brasil puede darse el lujo que quiera, tal es así que también solicitaron enchufes especiales para conectar celulares y consolas de videojuego, como para descontracturar la previa del clásico.
También hay otras solicitudes especiales que tienen que ver con la gastronomía, un aspecto clave e importantísimo para un plantel compuesto por deportistas de alto rendimiento. Se trata de un amplio menú de siete páginas que entregaron el chef y nutricionista al hotel sanjuanino, hace pocos días. El mismo incluye siete variedades de panes: el más insólito es el de remolacha. Además, pidieron panes de harina de mandioca, un producto muy utilizado para la clásica farofa, un plato típico de Brasil. “Es difícil conseguir la mandioca en San Juan. También yogures y otros lácteos de determinadas marcas”, agregó la fuente consultada.
La carta que tendrá el combinado puntero e invicto de las Eliminatorias también incluye filete de lomo (lo que más se va a consumir en los dos días de estadía), salmón, lenguado (pez plano de aguas templadas), pata muslo y pechuga de pollo. De bebidas, aguas y gaseosas; por ahora no solicitaron bebidas alcohólicas, mucho menos algún vino tradicional de San Juan.
Para cumplir con el exigente menú, el hotel contrató a un chef que se encargará exclusivamente de alimentar a la plantilla brasilera. Si bien la empresa cuenta con un cocineros propios, para esta ocasión decidieron contratar los servicios del sanjuanino Claudio Rosales. “Ellos traen chef y nutricionista, pero lo que harán solamente es supervisar todo nuestro trabajo, que todo funcione de acuerdo a lo pactado. Son exigencias de nivel internacional”, explicaron desde el hospedaje.
Tiempo de San Juan