Mientras avanza la causa que investiga la violación en grupo a una joven de 20 años en el barrio porteño de Palermo, las secuelas del aberrante hecho repercuten también en las familias de los imputados. “Siento que estoy muerta en vida”, dijo Jorgelina, la madre de uno de ellos.
La mamá de Tomás Domínguez, uno de los detenidos por el aberrante ataque, contó que se enteró por las redes sociales de lo que había ocurrido y que todavía no pudo ver a su hijo. “La encargada de hablar con él me dijo que estaba angustiado y un poco nervioso. Pidió una muda de ropa y libros”, manifestó.
Ni Jorgelina ni su otra hija, hermana de Tomás, se animaron a salir de su casa desde que la noticia estalló el lunes a última hora. Ambas están conmocionadas por la situación del joven, pero además tienen miedo por las amenazas.
“Que merecemos la muerte como el chico, que me van a incendiar la casa. Pasaron la foto de mi casa por todas las redes. Mi hija tenía escraches con su nombre. No sabemos como seguir”, expresó la mujer.
De acuerdo a su relato, la última vez que habló con Tomás fue el domingo a la noche. “Me dijo: ‘Mami estoy en un after’. Después me comentó que iban a Plaza Serrano y no me contestó más. Nos enteramos de todo por las redes. Yo pensaba que lo habían agarrado porque tenía porro en la mochila. Pero jamás me hubiera imaginado que era por un abuso”, recordó.
“No lo puedo defender porque no sé que pasó. Pero si él lo hizo no dudo en que me lo confesaría”, sostuvo Jorgelina. En relación al resto de los acusados, señaló que solo uno de ellos frecuentaba su casa y era amigo de Tomás, pero dijo no conocer al resto.
Y concluyó: “Siento que estoy muerta en vida. Es aberrante esta situación y si realmente hizo algo lo repudiamos. Me duele porque es mi hijo. Nosotros no le enseñamos a hacer eso”.
En tanto, en las redes también siguen las repercusiones y el repudio de los usuarios es unánime. A través de su cuenta de Twitter, una joven expresó: “A Tomas Domínguez lo conocí en un boliche en 2015. Desmejoró mucho. Lo habían echado de un colegio por robarse una computadora y luego venderla. Es culpa de sus progenitores por no ponerle límites”.
Cómo sigue la investigación por la violación grupal en Palermo
Los investigadores del caso solicitaron a quienes cuenten con filmaciones en las que se observa el paso de los imputados en los momentos previos el hecho que las remitan a la fiscalía, a efectos de incorporarlas a la causa.
Según un comunicado publicado en el portal institucional fiscales.gob.ar, la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional 48, a cargo de Eduardo Rosende, solicitó que sean enviados esos videos por correo electrónico a la dirección fiscri48-nac@mpf.gov.ar.
“En función de la gravedad y particularidades del hecho, y a fin de brindar la máxima protección a la víctima, se trabaja coordinadamente con la Secretaría de Coordinación Institucional de la Procuración General y la Dirección General de Acompañamiento, Orientación y Protección a las Víctimas (Dovic)”, sostiene el texto.
Además, el Ministerio Público Fiscal solicitó a los medios que tomen “el máximo recaudo al momento de difundir circunstancias relacionadas con la investigación, teniendo en cuenta la reciente difusión de imágenes del hecho, que resultan de alto impacto para la víctima”.
“La fiscalía estimó fundamental requerir a los medios masivos de comunicación y a la ciudadanía la mesura y máxima prudencia correspondientes, a fin de brindar a la damnificada el espacio necesario para transitar lo ocurrido y evitar su revictimización”, explicó.
La causa por el “abuso sexual agravado” de la joven de 20 años está a cargo del juez Marcos Fernández, titular del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional 21.