Durante la mañana de hoy, docentes autoconvocados se manifestaron cortando la Ruta 60, en San Blas de Los Sauces ante el pedido de aumento salarial.  

Una docente brindó declaraciones luego de la protesta, y contó en primera persona la realidad que se vive en el interior de La Rioja en materia educativa. 

Dijo que “se torna bastante difícil“ pensar diferente en el interior de la provincia, porque “los tienen marcados”. Sin embargo que llegaron a esta situación “por una cuestión de cansancio” y actúan de manera independiente en relación a los gremios porque ya no se sienten representados. 

En ese marco apuntó contra UDA, dado que aún no brindaron declaraciones luego de la mesa salarial que estaba prevista para el 19 de mayo, “no hemos tenido respuestas ni siquiera por privado”. “Ya no nos contestan más”, indicó. 

Por otro lado se refirió a las condiciones laborales de los docentes del departamento, comentó que la mayoría de las escuelas son de jornada completa,  por lo que ingresan a las 8.30 hasta las 16:30 horas en el horario de invierno. 

“A veces ya somos nosotros los niñeros”, dijo. “En el interior se viven muchas situaciones que quizás en la capital no se viven tanto como acá, porque son muchas horas las que estamos con los chicos”, expresó. 

Además comentó que en la escuela donde trabaja se calefaccionan con leña, y que varias instituciones organizan bingos para comprar electrodomésticos y mejorar las condiciones. 

Respecto al alimento que reciben los estudiantes, explicó que el desayuno es el mate cocido con una rodaja de pan, y que para el  almuerzo suelen ser guisos, locros o sopas. Mientras que, por lo menos en la institución donde ella trabaja, no dan postre. 

“A veces falta la comida. Los chicos desean más comida y se hace lo justo”, manifestó. 

Finalizando dijo que su jornada laboral no termina cuando se despide de los chicos, sino que “es todo el tiempo estar pendiente de la escuela”.  

“Es por eso que salimos. El trabajo de cada uno merece ser bien pagado”, concluía, mientras denunciaba que trabajan ocho horas, y solo le pagan seis. 

Fuente: Fénix