La interna en el Gobierno parece no dar tregua. Esta vez fue el ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat, Jorge Ferraresi, quien envió un controvertido mensaje al afirmar en un acto que encabezó en Avellaneda que si el Frente de Todos no se impone en las elecciones presidenciales del próximo año “algunos” van a ir presos y “otros volverán a dar clases en las universidades internacionales”.
Ferraresi, quien reemplazo a María Eugenia Bielsa al frente del Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat de la Nación, en noviembre de 2020, volvió a su distrito donde compartió un acto, en conmemoración por los 19 años de la asunción presidencial de Néstor Kirchner, con Martín Sabatella, referente de Nuevo Encuentro, y Emmanuel González Santalla, senador provincial de La Cámpora, entre otros referentes kirchneristas.
Todo se desarrolló en la sede de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), pegado al Parque de Villa Domínico, donde el exintendente recordó al expresidente y expresó que “Néstor abrió el camino” hacia la transformación. Pero aclaró que “las verdaderas peleas, las peleas más fuertes, las más desiguales” la dio Cristina Kirchner con la fuerza de “la militancia de la gente”.
Sin embargo, el ministro citó al exmandatario en otro tramo de su discurso cuando indicó: “Lo importante no es ganar una elección, sino mantener las convicciones y esas convicciones que tenemos que mantener tienen que ver con el camino hacia la utopía”. Fue ahí donde instó a “tener claro hacia dónde vamos” y que para ello era necesario también “tener claro qué era el año 2019, no sólo en referencia a lo que dejó el gobierno de Mauricio Macri sino también a los “poquitos” que eran en 2017 cuando se iniciaba el proceso de retorno del kirchnerismo. “Nadie quería poner nada”, apuntó.
“A nuestra historia militante no nos tienen que contar el esfuerzo que tenemos que hacer, lo tenemos que hacer porque es nuestra historia, nuestra obligación y nuestro compromiso”, arengó.
Fue en ese momento que le agregó un tono polémico a su mensaje. “Algunas veces estaremos en el Gobierno y otras veces no, y si perdemos algunos vamos a ir presos y, seguramente, otros volverán a dar clases en las universidades internacionales”, expresó el ministro en una expresión que marca las diferencias entre el kirchnerismo y el albertismo.
Luego, Ferraresi destacó la resistencia peronista, recordó a los desaparecidos y resaltó la importancia de la militancia. Puntualmente hizo mención a aquellos que “estuvieron presos o se tuvieron que exiliar”, a la vez que se diferenció de los peronistas que se entusiasmaron con los años 90, en referencia al menemismo.
Más allá de su controvertida frase, el ministro indicó que tras la finalización del gobierno de Alberto Fernández habrá “otros que volveremos al barro, volveremos al territorio, donde nunca hemos dejado de estar y tendremos las consecuencias”. Sobre este punto no descartó posibles “persecuciones a los dirigentes populares”.
“Ya sabemos lo que nos va a tocar, pero vamos a construir unidad”, aseveró el ministro, quien se estima que volverá a postularse para intendente de Avellaneda, tras la modificación de la Ley que limitaba a dos mandatos la gestión de los intendentes bonaerenses. No obstante, Ferraresi, con su pedido de licencia en 2020 para asumir como ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat, ya se había quedado habilitado para un posible nuevo mandato como jefe comunal.
Casi en el cierre de su discurso, Ferraresi insistió con su llamado a “construir la unidad”, aunque se preguntó “¿unidad para qué?”. Fue así que recordó que se dijo alguna vez “la unidad hasta que duela” y expresó que “lo que duele es la desunión, la unidad no duele”.
Por eso, Ferraresi insistió en alcanzar “la unidad” dentro del Frente de Todos “para que nunca más vuelva el neoliberalismo a la Argentina”. “Esa es la unidad que tenemos que construir, vamos a trabajar para cumplir con el mandato del 2019, pero con la obligación de construir el 2023 con un gobierno nacional y popular que profundice las políticas y ponga a la Argentina de pie”, remató.