En la tarde de ayer se viralizó un audio del funcionario sanagasteño Enzo Córdoba, quien proponía matar al periodista Nelson German, de Radio Fénix.

“Hay que cagarlo matarlo y tirarlo en una bolsa negra”, dijo Córdoba en el audio, que al parecer fue enviado a un grupo de WhatsApp.

De acuerdo al contenido del audio, la bronca era por una entrevista que German le hizo a Ezequiel Vázquez, el joven que en los últimos días denunció a través de varios medios al intendente Federico Sbrioli, de quien fue su chofer.

Vázquez aseguró que Sbiroli lo mandó a robar las llaves del parque automotor de Sanagasta e hizo una presentación por ese caso ante el Ministerio Público Fiscal. También contó que el Intendente se metía en el baúl de su auto para violar la cuarentena y que se llevó dos valijas con $12 millones a su casa.

Córdoba pidió disculpas y dijo que el audio fue una reacción que tuvo porque estaba enojado. German las aceptó.

La pregunta es si acaso esto es suficiente, en medio de la violencia política que vive el país. El peronismo se indignó con el diputado Martín Menem, pero guardó silencio sobre este tema. Tampoco hubo declaraciones de repudio, hasta el momento, sobre lo dichos del concejal que reivincidó a Montoneros. La violencia política tiene que ser un límte que nadie debe cruzar.

Lo que más llama la atención es el silencio de Sbiroli. El propio Córdoba reconoció que trabaja para él. Su repudio debería haber sido el primero.