La inflación del 2022 fue de 94,8%, informó este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) al publicar el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de diciembre, que arrojó una variación de 5,1%.

De esta manera, el acumulado del año pasado fue el más alto desde 1990, cuando se ubicó en 1343,9%, y sustancialmente por arriba del 57,7% que la anterior gestión económica, conducida por Martín Guzmán, había calculado para el Presupuesto 2022.

Días antes, la inflación en la Ciudad de Buenos Aires creció 5,8% en el último mes del año, resultando en una variación anual de 93,4%. 

Las consultoras económicas estimaron la suba de precios del mes de diciembre en un rango de 6,2% y 4,3%: 

LA INFLACIÓN Y LAS ASPIRACIONES DE MASSA

El líder del Frente de Renovador asumió a comienzos de agosto en la cúspide de la crisis exacerbada luego de la renuncia de Martín Guzmán, la cual se visualizó en el 7,4% que otorgó la inflación de julio.

En los meses subsiguientes, la inflación se mantuvo por encima de los seis puntos, a excepción de noviembre, que mostró una baja importante hacia el 4,9%.

Alerta para Massa: una certificación para inversiones que el mundo le exige a la Argentina, en peligro por la pelea con la Corte

En paralelo al debate por el pedido de juicio político a la Corte Suprema que impulsa Alberto Fernández, desde el Ministerio de Economía a cargo de Sergio Massa están alertas por un proyecto clave para la Argentina en términos de transparencia y atracción de inversiones: la modificación a la ley de lavado de activos y lucha contra el financiamiento al terrorismo que espera su aprobación en el Congreso.

Una luz roja se encendió en los últimos días en los despachos de la Casa Rosada ante la decisión de la oposición de Juntos por el Cambio de no tratar ningún proyecto de ley que impulse en sesiones extraordinarias el Poder Ejecutivo si se avanza con el pedido de juicio a la Corte. 

Es que además de leyes clave para la economía como el blanqueo de capitales, la ley de hidrógeno verde o la promoción agroindustrial en el temario que promueve el Gobierno figura la modificación a la ley de lavado.

Se trata de una iniciativa que giró el Presidente al Congreso el año pasado y que el oficialismo estaba por emitir dictamen cuando se desató todo el debate en torno a las acusaciones del oficialismo contra la Corte.

El tratamiento de este tema no es menor para Massa por una simple cuestión: se trata de una normativa que pide el GAFI (el grupo de países que combate el lavado, del cual forma parte la Argentina) para actualizar las leyes de lucha contra la delincuencia transnacional.

Allegados a Massa admitieron ante El Cronista que si no se aprueba cuanto antes la nueva ley de lavado “la Argentina no alcanzaría los objetivos planteados por el GAFI y será un problema para atraer inversiones”. Es que los empresarios extranjeros evalúan si un país tiene actualizada su normativa de lavado de activos y lucha contra el terrorismo antes de desembolsar capitales en una Nación.