El ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, confirmó que habrá una PASO para definir el candidato a presidente. En medio de las internas en el Frente de Todos, el oficialismo irá con dos listas.

“Si no se logra la unidad de un candidato, hay que ir a una PASO para ordenar el espacio”, dijeron hace unos días a este medio cercanos al titular de la cartera, que se mueve en modo candidato con el visto bueno de Cristina Kirchner, pero que lejos está aún de anunciar una eventual postulación.

En ese contexto, Wado señaló que la decisión de que finalmente haya elecciones primarias se debe a la postura tomada por Alberto Fernández.

“El presidente definió una estrategia unipersonal hace tiempo. Desde el frente le pidieron discutir parte de la misma, pero no hubo y no existió el ámbito para discutirla, con lo cual lo que tenemos hoy es producto de la decisión unipersonal del presidente de la nación que nos llevó hasta acá”, dijo en diálogo con C5N.
Ante esta situación, remarcó: “Lo que nos queda hoy es eso: ir a una elección, que haya PASO”.

Además, sostuvo que “sería muy bueno que Alberto se presente, que el resto del Frente de Todos pueda armar una alternativa y que la gente pueda definir quien es el mejor candidato”.
Además, expresó que llamaron a reacomodar el bloque tras el ataque a Cristina Kirchner.

“Cuando vimos por primera vez un arma gatillándole en la cara de la vicepresidenta dijimos ‘acá hay que ordenar el frente porque hay sectores de poder en Argentina que están dispuestos a cualquier cosa’”, sumó.

Asimismo, resaltó: “A ella la quieren muerta o presa, es la yegua que no pueden domar”.
Por otro lado, en relación a su posible candidatura, expresó: “Yo soy parte de una generación que tiene ganas de que en Argentina se produzca un recambio generacional en serio y en muchos ámbitos”.

La confirmación del ministro se da mientras en el albertismo, el kirchnerismo y el massismo advierten con preocupación el crecimiento en las encuestas de Javier Milei, que de acuerdo a analistas y consultores, ya comenzó a robarle votos al Frente de Todos.

Incluso en algunos municipios de la provincia de Buenos Aires parte del electorado que hoy acompaña al libertario dijo haber votado al oficialismo en 2019.

Toda una verdadera preocupación para la Casa Rosada.