Luego del traslado de un cadete de policía a la ciudad de Córdoba por un cuadro renal, el Instituto Superior de Formación en Seguridad Pública y Ciudadana, comunicó que “se dispuso una revisión general de salud de todos los cursantes con fines preventivos”. Alejandro Sánchez (22) fue derivado desde Chepes a un hospital de la capital riojana y luego al hospital Privado de Córdoba a causa de un cuadro de deshidratación que le habría provocado una insuficiencia renal. La situación fue después de un entrenamiento según el relato de sus familiares.

En el comunicado emitido recién en la tarde de este martes, la institución informó que el Ministerio de Seguridad, Justicia y Derechos Humanos y de Educación, “paralelamente ordenaron una investigación administrativa que verifique el cumplimiento de los protocolos de entrenamiento en la formación de los estudiantes, la que ya está en curso de cumplimiento”.

Este martes se conoció que otro cadete fue internado mientras que un tercer joven volvía a ser hospitalizado. Lo confirmó a La Red, la directora del hospital de Chepes Luis Pasteur, Paula Sosa: “Ayer un aspirante ingresó en la mañana y en la noche ingresó el segundo. Estaban internados y se realizaron análisis, se administró la medicación y se evaluó y se determinó derivar a uno a la Capital para hacer interconsultas para estudios de mayor complejidad”.

La profesional evaluó que “si tiene dolor muscular, cefaleas y edema en miembros inferiores, no sé cuál es el tipo de entrenamiento ni la exigencia”.

Por su parte, la Secretaría de Derechos Humanos de La Rioja, envió un pedido de informes a la Dirección de Nivel Superior del Ministerio de Educación de la Provincia, cartera que la cual depende el Instituto Superior de Seguridad y sus delegaciones del interior, donde se forman los aspirantes a la Policía Provincial.

“El motivo, de público conocimiento, está referido a la situación padecida por cuatro estudiantes en la localidad de Chepes, que tuvieron manifestaciones, de distinta gravedad, de deshidratación, después de las instrucciones físicas que se imparten en la formación”, dice el comunicado, y expresa “la preocupación, que después del doloroso caso Garay, vuelvan a suceder estas circunstancias que interpelan los modos de instrucción física si están conforme a los protocolos de buenas prácticas y DDHH”.

“Entendemos que se está haciendo la investigación pertinente para establecer responsabilidades y dar una respuesta sobre los aspirantes afectados y desde nuestra Dirección de protección, hemos visitado a la familia de Julio Alejandro Sánchez, que fue derivado al hospital Vera Barros desde Chepes y, ayer, trasladado a la ciudad de Córdoba, para una mejor atención por el cuadro de insuficiencia renal aguda, poniéndonos a disposición para cualquier trámite de nuestra competencia”, relatan. 

“Mientras, es nuestro deber de organismo del Estado, advertir de la observancia de derechos humanos fundamentales para una formación ajustada a las normas y el paradigma democrático”, dijeron desde el organismo que depende de Délfor Brizuela.

Fuente: Rioja/12