*Por Juan Pablo Parrilla

Hubo dos explicaciones que, a grandes rasgos, ensayaron los dirigentes peronistas de La Rioja para explicar la derrota electoral de ayer y el ostensible cambio del escenario electoral entre las elecciones provinciales de mayo y las primarias nacionales. Primero: “Massa fue una mochila”. Segundo: “Faltó aparato / militancia”. Dentro de Unión por la Patria se miró más hacia adentro que hacia afuera.

Pero más allá de un contexto económico que resultó fulminante, es innegable que el factor Milei marcó a fuego los resultados. Basta para ello comparar la performance de los candidatos entre mayo y ayer. 

Antes que nada, una aclaración. No hubo forma de acceder a los resultados del escrutinio definitivo de las elecciones de La Rioja, a pesar de la consulta a varias fuentes oficiales. Ni siquiera la página del gobierno nacional lo informa. Este análisis está limitado a comparar los resutlados que tiene la web de datos abiertos de Argentina con los numerosos del conteo provisorio de los comicios de ayer, que se paralizó con el 95,60% de los votos escrutados.

Ahora sí, el análisis.  

Martín Menem obtuvo ayer 62.951 votos, que equivalen al 33,02% del total. En mayo, cuando fue candidato a gobernador, lo votaron 31.023 personas, el 15,56% del total. Esto quiere decir que duplicó su apoyo. No necesita mucha explicación: la diferencia fue la presencia de Javier Milei en la boleta.  

Evidentemente, Menem hasta ahora sólo había podido capitalizar una parte del respaldo de Milei. Esto se evidencia en que, esta vez, sólo 6.656 boletas ingresaron a las urnas en La Rioja con el voto de Milei, pero sin el de Martín Menem, una de cada diez. Y de esos votos, apenas 764 eran de la Ucedé, y 396, de Proyecto Joven, las otras dos agrupaciones que apoyaron a Milei. Fueron casi 5.500 votos al economista libertario sin candidatos provinciales de ese sector político.

Quintela, por su parte, en mayo había obtenido 100.926 votos, el 50,63% del total. Y ayer, Sergio Massa y Juan Grabois sumaron en La Rioja 60.160 votos, de acuerdo al conteo parcial. Es un 59,30% de lo que obtuvo el Frente de Todos en las elecciones a gobernador. El peronismo perdió más de 40 mil votos en apenas 3 meses.  

Dos preguntas. Una: si el ascenso de Martín Menem se debe a Milei, ¿se puede atribuir a Massa la caída del peronismo? Dos: ¿una parte de esos votos que se fugaron fueron de Quintela a Milei?

Aquí hay que hacer una primera advertencia. En mayo votaron 212.416 personas y ayer, 192.686. Hubo casi 20 mil votantes menos. Pregunta: ¿son votos del aparato peronista, que en esta ocasión no se movilizó con tanta intensidad?  

También ayer hubo una notable caída del voto en blanco, de 10.383 a 3.568 sufragios. Este domingo apenas uno de cada 50 votantes de La Rioja no eligió a ningún candidato presidencial.

¿Qué pasó con Juntos por La Rioja? En mayo, como candidato a gobernador Felipe Álvarez tuvo 63.573 votos, el 31,89% del total. Ayer, Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta sumaron 38.659 votos. Hay casi 25 mil sufragios de diferencia.  

¿Y el factor Schiaretti? Sobre este tema hay poco acuerdo en la clase política. La pregunta es a quién le quitó votos. Y quizás tengan todos un poco de razón. Fueron 13.371 sufragios en La Rioja, casi el 7% del total. Y un poco menos en los cargos legislativos, donde Alberto Paredes Urquiza consiguió 9.780 votos como candidato a senador. 

Todo indica que La Libertad Avanza es el espacio que más cintura tiene para crecer en octubre. Y el peronismo seguramente movilizará una parte del electorado para intentar aumentar el caudal. El escenario para Juntos por La Rioja, en tanto, es pesimista. Perdió el monopolio de la oposición y todavía no está del todo claro hasta qué punto deberá compartir ese cartel con Martín Menem. Su única espanza es que Patricia Bullrich llegue al ballotage. Milei lo hizo.