El gobernador, Ricardo Quintela, se refirió a las declaraciones del vocero presidencial, Juan Manuel Adorni, quien ante la consulta de los periodistas al tratamiento de la Ley Ómnibus denominada “Bases y puntos de partida para la libertad de los argentinos” señaló que no piensan en realizar modificaciones.
El riojano ratificó que sostener estas medidas llevará a un “genocidio social”.
En ese sentido, Quintela planteó que “no se puede pensar en libertad sin que cada ser humano pueda elegir y decidir. Hoy, dadas las circunstancias sociales y económicas que atraviesa el país, eso es impensado porque la gente está atada a la imprevisibilidad y al ahogo financiero. Las familias no pueden decidir, solo les queda sobrevivir a esta situación de exterminio a las que las sometió el Gobierno Nacional”.
“Si siguen tomando este tipo de medidas negativas para el pueblo, si siguen actuando de esta manera y piensan que no habrá una reacción popular, me parece que están equivocados: sí habrá porque la gente no podrá vivir”, sostuvo.
“Adorni señala que quienes estamos en contra de las nuevas medidas adoptadas cuestionemos ‘algunos aspectos’, lo seguiremos haciendo en tanto y en cuanto veamos cómo eso afecta a la ciudadanía. Ya lo dije, ir en contra del pueblo no es una opción. Nosotros sabíamos lo que iba a ocurrir y las consecuencias negativas que traería pero nunca pensé que iba a ser tan cruel, tan salvaje, tan criminal, sobre todo en los sectores medios y vulnerables. Es muy brutal el ajuste. Quedarnos callados sería ser cómplices de este genocidio social”, expresó.
El primer mandatario añadió que “el presidente Milei primero habló que en 45 años nos pareceríamos a Irlanda, luego que en un año y medio veríamos la luz al final del túnel y recientemente dijo que en 15 años veríamos un tercio de lo que él considera mejoras y que no son más que un ajuste salvaje que aplica la motosierra en el pueblo. Nos plantean irónicamente que no la vemos, pero lo único que vemos es que hay más pobreza, hambre, desesperación y mayores dificultades para que la gente alcance el nivel de vida que tenía. Vamos hacia una catástrofe social donde la única beneficiada es la elite que concentra el poder económico, mediático y político.”.
“Por otro lado -continuó- Adorni dice que venimos de 100 años de decadencia. Sin embargo, en mi provincia en el gobierno de Macri se paralizó la obra pública no se construyó ni un solo jardín de infantes y apenas en cuatro años se terminaron 400 viviendas; se perdieron puestos de trabajo en el Parque Industrial porque cerraban las fábricas. Con la llegada nuevamente del peronismo a Nación, La Rioja tuvo un crecimiento importante porque se reactivaron obras y el Parque Industrial, se potenció el turismo y con eso se fortaleció el sector hotelero y gastronómico lo que llevó a que se generaran puestos de trabajo y creciera en materia de estabilidad prestacional, servicios como salud, educación, seguridad y justicia”, graficó.
“En cambio con La Libertad Avanza -siguió- en menos de un mes desde que asumió el Presidente, perdimos mas de 1.700 puestos de trabajo en el sector de la obra pública, lo que generó el despido de esas personas que se quedan sin sustento para sus hijos. Ellos, con la política de ajuste y la liberación de precios, licuaron los salarios”.
El primer mandatario riojano también hizo hincapié en la intención de privatizar las empresas del Estado. “Las empresas del Estado son instituciones creadas para llegar ahí donde el mercado no lo hace precisamente porque no genera un rédito económico significativo, lo que pasa es que no todo se mide en números. Siete familias de la zona rural de mi provincia que ven limitada su actividad y su progreso por falta de electricidad ¿no merecen acaso contar con un servicio esencial? Los riojanos, los argentinos no son un número. El Estado debe perseguir la renta social y acompañar al mercado”, enfatizó y agregó “eso sin contar los puestos de trabajo directos e indirectos que genera y el apoyo que significa para que los pueblos puedan desarrollarse”.
Finalmente dijo que “hablan de que buscan evitar la crisis cuando lo único que hacen es acrecentarla con un recorte salvaje, con la eliminación de derechos y con extorsiones a las provincias para que avalemos las medidas a cambio de plata. Siembran un mensaje de odio alentando que corra sangre en la clase política, y la sangre que correrá es en su mayoría del pueblo argentino”. “Seguiremos dando batalla en defensa del federalismo, de La Rioja y Argentina”, declaró.
Fuente: Nueva Rioja