Un operativo policial interprovincial logró evitar este lunes por la tarde que una mujer se llevara sin autorización a su hija de 4 años hacia Bolivia, en un caso que mantuvo en vilo a las autoridades judiciales y policiales de Mendoza durante varias horas y que culminó en la provincia de La Rioja.

La historia comenzó en Costa de Araujo, Lavalle, cuando un hombre de 47 años de origen boliviano se presentó en la Comisaría 63ª para denunciar que su pareja y concubina se había llevado a la hija de ambos con presunta intención de abandonar el país sin su autorización. La pequeña, cuya identidad se preserva por ser menor de edad, había sido vista por última vez en compañía de su madre en su domicilio de la zona rural.

Los primeros datos obtenidos por efectivos de la Unidad Investigativa de Lavalle (UID) revelaron que una familiar directa de la madre había actuado como colaboradora en el traslado inicial, llevándolas desde el domicilio hasta el centro de la localidad lavallina.

Durante el interrogatorio policial, esta persona, tía de la criatura (hermana de la madre) se mostró reticente a brindar información sobre las últimas horas de la mamá y su hija, aunque los investigadores lograron reconstruir los pasos siguientes gracias a una serie de pruebas que fueron aportadas por el denunciante.

La mujer “solamente” confirmó que ambas mujeres habían tomado el colectivo con destino a Bolivia y poco más conocía de la situación, aportaron fuentes policiales y judiciales a El Sol.

El operativo, coordinado con el Ministerio Público, permitió determinar con el paso de las horas que madre e hija habían abordado un colectivo de la empresa El Manantial en calles Colón y Rivadavia de la citada localidad con destino al norte del país, una intersección donde regularmente paran este tipo de transporte de larga distancia. En ese momento se inició un trabajo contrarreloj para intentar ubicarlas.

Los policías de la UID logró contactarse con los responsables de la empresa de transporte y les confirmaron que las buscadas viajaban en una de sus unidades que ya había ingresado a la provincia de La Rioja.

Inmediatamente, se activó un operativo conjunto entre las fuerzas policiales de Mendoza y La Rioja (Gendarmería y Policía provincial) con el objetivo de frenar la marcha del colectivo.

Después de unos minutos, se comunicaron con el chofer de la unidad y el trabajador confirmó que la madre y su hija efectivamente tenían como destino Bolivia, frenando la marcha en un puesto policial de la localidad de Talamuyuna.

La madre quedó aprehendida a disposición del fiscal de Delitos No Especializados Martín Lucero, mientras que la pequeña fue puesta bajo el cuidado temporal de la División de Asuntos de Menores de La Rioja, siguiendo los lineamientos establecidos para estos casos. El expediente, detallaron fuentes judiciales, quedó caratulado como averiguación de sustracción de menores.

Fuente: El Sol / Imagen ilustrativa