*Por Juan Pablo Parrilla

Otra semana áspera en la política riojana. En este panorama se destacan tres hechos significativos, pero hay uno que es una de las vedettes del microclima político, aunque poco y nada se habla en público: la bronca de algunos intendentes a partir del debate por el presupuesto 2023.

La noticia se conoció por voz del diputado Sergio Casas, que “primereó” al resto y anunció que firmó el dictamen del proyecto de presupuesto en la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados y que eso incluye $47 mil millones de fondos extracoparticipables para La Rioja.

El monto es el 87% de lo que en el gobierno provincial estiman que está un punto de coparticipación, que es lo que la provincia perdió en 1988 y que ahora se busca compensar. Entonces, ¿por qué una buena noticia despertó recelos entre los intendentes?

Un poco de memoria para comprender el conflicto. En 2021, los fondos extracoparticipables fueron de $12.500 millones para el gobierno provincial y $500 millones para los municipios, de los cuales $250 millones fueron para la capital provincial y el resto, para los otros 17 departamentos. El dinero fue depositado directamente desde la Casa Rosada en las cuentas de las comunas.

Al año siguiente, en 2021, el presupuesto para este 2022 no se aprobó y fue reconducido y actualizado a través de un decreto del presidente Alberto Fernández emitido en mayo. La Rioja logró duplicar los $12.500 millones a $25 mil millones para la provincia, y de $500 millones a $1.000 millones para los municipios, aunque algo cambió en la acreditación de fondos: el dinero siguió llegando a los departamentos, pero el monto de la actualización comenzó a ser girado a la Provincia, que debía distribuirlo.

Por los menos dos intendentes consultados para esta nota aseguran que eso no ocurrió y que los fondos extracoparticipables sólo fueron enviados en su totalidad a la Capital (algo que la comuna desmiente), mientras que en el interior sólo recibieron las cifras sin actualización. Este medio pudo corroborar que en los últimos días hubo llamados entre intendentes por el tema. Apuntan contra el ministro de Hacienda, Jorge Quinteros, y el jefe de Gabinete, Juan Luna Corzo. En el quintelismo advierten que hace años que no había tantas obras en el interior provincial y que la llegada del dinero está garantizada.

Ante ese panorama, en la semana que pasó algunos intendentes quisieron contactar a algún funcionario del Ministerio de Economía y hubo gestiones con los diputados nacionales para intentar garantizar la llegada directa del dinero del presupuesto 2023, sin el filtro de la Provincia. No tuvieron éxito.

Hasta ahí hay un tema de discrecionalidad que incomoda, aunque los intendentes saben que es parte de las reglas habituales de la política. Pero hay un condimento que le puso picante a la cuestión. La capitalina Inés Brizuela y Doria consiguió que los diputados nacionales de Cambiemos fuercen una negociación con el Frente de Todos para garantizar que la Casa de las Tejas le coparticipe efectivamente esos fondos o lleguen sin intermediarios.

En ese sentido, la oposición ya advirtió que aprobará el presupuesto en forma general, pero en la votación de cada artículo en particular se podrían caer los fondos extra de La Rioja si Quintela y Brizuela y Doria no alcanzan un acuerdo. Esta semana habrá reuniones por el tema.

Los intendentes reclaman federalismo. “No queremos que Inés sea la única que reciba los fondos de manera automática. No nos pueden discriminar así”, manifestó un jefe comunal a este cronista, mientras que desde la Casa de las Tejas aseguran que no hay nada de qué preocuparse, menos en un año electoral.

Wado, el elegido

La llegada a La Rioja del ministro del Interior, Eduardo “Wado” De Pedro, no es una señal menor, sobre todo porque fue unos días después de la foto con olor a oportunismo de Sergio Massa con los gobernadores del Norte Grande, que necesitan más subsidios al transporte y al consumo energético, dos temas muy sensibles en el escenario preelectoral.

Desde este espacio periodístico se advirtió en más de una ocasión que los gobernadores no tienen un candidato firme de cara al 2023 y esa situación los tiene inquietos. Son pocos los que celebraron el empoderamiento de Massa. Quintela incluso llegó a dejar entrever cierto malestar cuando el líder del Frente Renovador sonaba como posible ministro de Economía. Y encima empezaron a ver ciertos movimientos de Alberto Fernández que los hacen pensar que luego del Mundial podría llegar el llamado presidencial con la famosa pregunta de “¿estás conmigo o no?”.

El acto en el Sindicato Luz y Fuerza capitalino fue un acto kirchnerista en el que la vicepresidenta Cristina Kirchner fue una protagonista omnipresente. Su nombre sonó en los cánticos y hasta “Wado” De Pedro dijo en su discurso que mandaba saludos. La contracara fue Alberto Fernández. Nadie lo nombró ni lo recordó. ¿Quintela lo abandona definitivamente?

Si efectivamente se consolida ese vínculo de Quintela con el kirchnerismo habrá repercusiones sobre los que pretenden ser candidatos en 2023 con el apoyo de CFK y compañía, como el diputado Sergio Casas, que suele invocar a Máximo Kirchner como garantía de su reelección, o como Ricardo Guerra, Luis Beder Herrera e Hilda “Beba” Soria, quienes deberían pasar por el filtro del Gobernador, máxime cuando en las encuestas son ilustres desconocidos o sus imágenes negativas son mayores que las positivas.

¿Arranca o no arranca?

Para finalizar el panorama, hay un tema que debería haber sido “la” noticia de la semana, pues estaba todo previsto para que ingrese en la Legislatura el proyecto que declare la necesidad de reforma de la Constitución provincial, pero no ocurrió.

La semana pasada el asesor de gobierno Pedro Goyochea convocó a varios diputados para advertirles que estaba todo listo. También hubo reuniones entre las máximas autoridades. Algo retrasó los planes

“Va a salir”, es el mantra que siguen repitiendo todos en el palacio legislativo. Saben que, aunque el proyecto de reforma es una prioridad política del gobernador, también es parte de su estrategia electoral, como se explicó en esta columna hace 15 días.

¿Qué retrasó la presentación del proyecto? Algunos lo atribuyen a la mala redacción del texto, otros a la informalidad con la que Juan Luna y Goyochea manejaron el tema. “La presentación que nos hicieron fue una falta de respeto”, dijo un diputado unas horas después de la reunión. Pero también hay cuestiones que tienen que ver con los famosos “tiempos de la política” a los que habrá que prestar atención en los próximos días.