Existen costumbres en La Rioja que el tiempo se encargó de quedar olvidadas, especialmente en lo más consumido en el día, el mate. Te presentamos el Molle, un árbol milenario considerado sagrado en pueblos como los Incas, los Mapuches o la cultura Wari de Perú.

Sus propiedades curativas son increíbles, y en La Rioja se puede encontrar en zonas de campo, que todavía mantienen la costumbre de cosecharlo para bebidas, curasiones y especialmente para el mate.

Es un árbol de 3 a 12 m de altura perteneciente a la familia de las Anacardiácias. Es un árbol robusto de copa globosa y frondosa y follaje perenne y brillante. Sus hojas son pinaticompuestas, con folíolos lanceolados y nervaduras secundarias paralelas muy notables. Su crecimiento es relativamente rápido y mejora con riego moderado. Tolera vientos y heladas intensos.

Es muy valorado por su fruto dulce y picante con el que se fabrica la “aloja de molle” (bebida apetitosa y refrescante de color amarillento y poca graduación alcohólica), de ahí su nombre “molle de beber”. Los frutos también son usados para endulzar el mate. Respecto a sus propiedades medicinales, la infusión que se obtiene de sus hojas se usa para apaliar resfríos, afecciones digestivas y respiratorias. Su intensa floración a fines de la primavera es valorada por los apicultores ya que produce gran cantidad de néctar y polen.

En medicina tradicional se utiliza en forma de infusión, decocción o extracto alcohólico para el tratamiento de la artritis, bronquitis, tos, y enfermedades del aparato digestivo, como antiinflamatorio, cicatrizante, emenagogo, antiespasmódico, antibacteriano y antifúngico. En casos de reumatismo o heridas se aplican como compresas o baños. También es diurético, hemostático, tónico, sedante, antimicrobiano, antiviral, citotóxico e inmunomodulador.

De gran importancia ecológica, el Molle es una de las especies más abundantes de los bosques serranos y contribuye de manera decisiva en la protección de las cabeceras de los cuencos de los cursos de agua evitando la erosión y facilitando la captación de lluvias en las nacientes de los ríos.