Tras ser señalado como sospechoso del asesinato de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell y luego ser sobreseído de la causa por falta de pruebas, Pablo Ventura decidió iniciar una demanda al Ministerio Público Fiscal del Poder Judicial bonaerense por el “daño moral causado”. De esta forma pidió un resarcimiento de 10 millones de pesos.
Su abogado, Marcelo Olmos, presentó un escrito que apuntó a los daños sufridos y sumó como prueba distintas notas periodísticas, además puso a disposición una serie de testigos para que declaren en esta causa. Ventura, fue detenido el 19 de enero de 2020 y estuvo 3 días en prisión junto con los rugbiers acusados del crimen.
Por su parte, la demanda dice lo siguiente: “Se reclama del Poder Judicial de la Provincia de Buenos Aires-Ministerio Público Fiscal en concepto de indemnización del daño moral causado al actor por la infundada e injusta detención y a más de la pérdida de la libertad y la alteración de la paz”.
Luego del crimen de Fernando Báez Sosa, tanto Pablo como su familia aseguraron que nunca estuvieron en Villa Gesell e incluso afirmaron que desconocían el motivo de por qué el grupo de rugbiers lo habían mencionado. En febrero de ese mismo año, el joven quedó desvinculado de la causa, después de su liberación.
Con respecto a los autores del asesinato, se determinó que el juicio será el 2 de enero de 2023 y se realizará en el Tribunal Oral en lo Criminal 1 de Dolores. Los jóvenes están acusados de “homicidio doblemente agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas”.
Fernando fue asesinado a la salida de un boliche en Villa Gesell el 18 de enero de 2020.
Según la fiscal de la causa Verónica Zamboni, los ocho acusados “acordaron darle muerte” y “previamente, distribuyeron funcionalmente sus roles”.