*Por el Equipo de Investigación de EL FEDERAL ONLINE
Una investigación de EL FEDERAL encontró más irregularidades en la aplicación de estacionamiento medido de La Rioja, que se suma a la larga lista de inconsistencias que este medio demostró con documentación. Esta vez, se detectó que la base de datos personales no está registrada como exige la ley, que su política de privacidad cita legislación española y que la CUIT incluida en los datos de contacto no coincide con la de la empresa ni la de ninguno de sus socios.
Cuando uno ingresa por primera vez a la aplicación se tiene que registar y la app pide permisos para usar la cámara y acceder a archivos personales. Ese proceso se hace sin tener la posibilidad de leer las políticas de privacidad.
Una vez que se completa el proceso sí se puede acceder a esas políticas. Ahí figura el primer error (pero no es el más grave. La normativa que figura es la Ley Orgánica de Protección de Datos Personales y el Reglamento General de Datos Personales, pero no de Argentina, sino ¡de España y de la Unión Europea!
En Argentina es obligatorio el registro de las bases de datos públicas o privadas, en virtud del artículo 21 de la ley 25.326. Una consulta en la base de datos oficial, accesible para cualquier ciudadano en este link, bastó para comprobar que ni Estacionalo SRL, ni sus socios Lorena Melchiori y Facundo Celarayan, ni su referente público, David Orlando López, tienen bases de datos registradas.
En otras palabras, la aplicación no cumple con la ley 25.326, por lo que está acumulando datos de manera ilícita, tal como establece el artículo 3 de esa ley, y está cometiendo una falta que el decreto reglamentario considera “grave” y es pasible de sanciones.
Lo más grave es que EL FEDERAL ya había advertido en una nota publicada en julio que en el PlayStore figuraba que “no hay información disponible” sobre la seguridad de los datos personales. Es decir que en todos estos meses no hubo la más mínima voluntad de cumplir con la ley que busca garantizar que los datos no sean usados con otros fines, como realizar estafas, espiar personas o, incluso, con fines proselitistas.
Por lo demás, las “Políticas de privacidad” de Estacionalo tienen un sinfín de inconsistencias, porque evidentemente hicieron copy y paste de algún sitio. Por caso, el texto cita permanentemente la normativa de la Unión Europa y de España, e indica que se pueden hacer reclamos ante la Agencia Española de Protección de Datos.
El copy y paste queda por demás expuesto cuando dice que los datos personales son recogidos con el objetivo de “proporcionar información, servicios, productos, información relevante y novedades del sector” y para el “envío de comunicaciones”. Nada más alejado de lo que hace Estacionalo.
Por último, el sitio advierte que “recogemos de forma automática datos sobre su visita a nuestro sitio web, según se describe en la política de cookies”, pero en ninguna parte del sitio figura esa “política de cookies”.
Una mancha más al tigre
En los datos de contacto de la Política de Privacidad hay otra irregularidad (una más y van…). Ahí aparecen la siguiente información:
Esto es importante, porque el Estado brinda a los ciudadanos distintas herramientas para garantizar la debida protección de sus datos personales. Y si los datos de contacto no son claros, el usuario no puede exigir el cumplimiento de sus derechos.
La denominación social está incompleta. Debería decir “Estacionalo SRL”. Pero además, la CUIT que figura no es la de Estacionalo, sino la de David Orlando López, la persona que se presentó junto a funcionarios como “socio gerente” de la empresa, a pesar de que no aparece como socio en el contrato social de la sociedad.
López es, además, la persona que dijo haber tomado créditos para invertir unos 15 millones de pesos en el desarrollo de la aplicación, pese a que ni él ni la empresa ni sus socios pidieron créditos por cifras millonarias, de acuerdo a los registros oficiales del Banco Central.
Es, en definitiva, una persona que le mintió a la sociedad riojana en una conferencia de prensa de la que participaron varios funcionarios.
El nivel de improvisación de los creadores de Estacionalo suma, de esta forma, nuevas pruebas. Se trata de una empresa sin antecedentes a la que le otorgaron por contratación directa una concesión millonaria a pesar de que la aplicación al día de hoy no está terminada. El Municipio perdió una oportunidad de recaudar dinero, pues el 70% de la tarifa se lo quedará la compañía. El proceso, además, no cumplió con los requisitos establecidos por la ordenanza citada por la propia Intendente. Y los $90 que se pagarán por hora será el precio más caro entre todas las capitales del país.
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